Alberto Fernández: "El plan económico va a ayudar a desacelerar la inflación"

"Estamos seguros de que el plan económico va a ayudar a desacelerar la inflación", aseguró el presidente Alberto Fernández desde París, donde se encuentra de gira, a horas de que se conozca el índice de abril que se sabe que será muy alto pero inferior al de marzo. Fernández reconoció que están lejos de estar contentos con los índices actuales y que eso está repercutiendo directamente sobre el poder adquisitivo de los salarios, por lo que deberán seguir trabajando en el tema atacando sus múltiples causas. Con todo, señaló que una parte de esa inflación es importada debido al crecimiento internacional del precio de los alimentos por la guerra en Ucrania, la preocupación que lo trajo a Europa y llevará mañana a la reunión con el presidente francés Emmanuel Macron. 

"La economía está creciendo mucho, estamos generando muchos trabajos nuevos formales pero nos está costando mucho corregir la distribución del ingreso y en eso tiene mucho que ver la inflación", remarcó el Presidente. La disminución del salario real -el fenómeno de los trabajadores pobres, como señaló la vicepresidenta Cristina Kirchner- es una de las críticas que se le señalan con insistencia a la gestión del ministro de Economía, Martín Guzmán, desde el oficialismo. "Y aún cuando alentemos que las paritarias resuelvan ese problema haciendo que los salarios estén por encima de la inflación, tenemos que trabajar en todas las causas que la generan", agregó. En la misma línea, marcó que "la inflación es muy dañina porque daña a los sectores menos pudientes, es el impuesto que se le cobra a los que viven de un sueldo".

Pero también habló de las "causas externas" de la inflación, importadas gracias al alza de las commodities impulsadas por el conflicto entre Rusia y Ucrania. Fernández comenzó la rueda de prensa que ofreció a los cronistas que cubren su gira en el primer piso de la señorial sede de la embajada en París, sobre la Rue Cimarosa, hablando sobre este problema, que explicó que fue el motivo de su viaje. "En muy poco tiempo organizamos esto y tuvimos una rápida respuesta", por lo que agradeció a Pedro Sánchez, Olaf Scholz y Macron. Insistió que se debía "hacer algo" porque el conflicto termine haciendo que las partes se sienten y encuentren un entendimiento. Habló como presidente de la Celac, por las consecuencias que esto genera en toda América Latina, el continente más desigual cuya situación empeoró con la pandemia. "La dimensión del conflicto adquirió características globales y las acciones repercuten en nuestra vida cotidiana", señaló. Un mundo periférico que "está padeciendo mucho".

La guerra no sólo disparó el precio de los alimentos sino también de la energía. El Presidente confirmó los aumentos de tarifas que comenzaron a discutirse en audiencias públicas y defendió de forma enfática la propuesta de segmentación, la que calificó como "progresiva" en términos económicos. Los aumentos suponen la aplicación de la segmentación del modo que el 10% más pudiente que se ve beneficiado con subsidios, dejen de ser subsidiados", explicó. Agregó que "hace que el que tiene, pague". Respecto a los sectores más desfavorecidos van a seguir recibiendo subsidios mientras que el resto va a tener aumentos pero siempre inferiores al índice de aumento salarial. "Tiene un carácter distributivo muy grande", volvió a defender la medida. Y señaló que la medida no se toma porque sea una imposición del FMI, sino que "lo estamos haciendo porque creemos que es necesario hacerlo porque es muy difícil pensar que la economía puede seguir subsidiando a los más ricos en materia energética".

Justamente, respecto al acuerdo con el FMI, el nivel de inflación y la suba del gas que Argentina debe importar ponen en duda el cumplimiento de lo pactado. "El FMI ya ha dicho que hay que revisar estos acuerdos porque la economía se ha alterado, asi que si es una idea que el Fondo tiene seguramente también será aplicable a nosotros", marcó. Dijo que todavía había que esperar para saber exactamente cuál será la repercusión de la guerra en Argentina, pero que la inflación ya era un indicio muy negativo.