El Senado aprobó el proyecto del Poder Ejecutivo que avala el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para renegociar la deuda de 45 mil millones de dólares que tomó la gestión de Mauricio Macri, con 56 votos a favor, 13 en contra y tres abstenciones. Se trata de trece senadores del Frente de Todos que votaron en contra y difundieron un documento para explicar los motivos.
En el escrito de de ocho páginas, los legisladores detallaron que los llevaron a votar de manera distinta que el resto de los miembros de su bancada política. "Esta artificial encrucijada a las que nos pretenden someter, de aceptarse, se transformaría en la derrota no solo del pueblo, que sufrirá las consecuencias de este pacto, sino que, además, se transformaría en la dolorosa derrota de la política, verdadera y vital herramienta que desde nuestras bancas pero fundamentalmente como militantes, no estamos dispuestos a aceptar", afirmaron en el texto.
En el documento, que fue publicado en redes sociales tras la sesión en la que se aprobó el acuerdo con el FMI, los senadores enfatizaron el "difícil cumplimiento" de las metas fijadas en el entendimiento y afirmaron que no permitirían el crecimiento económico. Entre los legisladores que publicaron los argumentos en sus redes al finalizar la votación, se encuentran Anabel Fernández Sagasti, Mariano Recalde o Eugenia Duré.
En el texto titulado "Crecer para pagar. ¿Es posible con este pacto?", los legisladores sostuvieron que su posición "no es espasmódica ni repentina, sino que es el resultado de un proceso, no exento de tensiones y debates, que se vienen desarrollando desde el primer momento en el que comenzaron las negociaciones con el FMI". Apuntaron que "los resultados a los que se arribó en la negociación de la deuda externa condiciona al país y la vida de las familias argentinas".
Los senadores aseguraron que el préstamo político a Macri "se hizo bajo múltiples irregularidades para la legislación y la institucionalidad de nuestro país y para el propio FMI". "Aquí radica, creemos, la cuestión institucional y política más grave de toda la operación. En lo que constituye quizás el hecho más pernicioso de los últimos años para la salud y la calidad institucional de la Argentina, la toma de deuda de Macri fue hecha de forma irregular, informal, y de espaldas al pueblo", sostuvieron.
Luego de enumerar una serie de irregularidades en la toma del préstamo, aseguraron que "toda la operación de esta deuda fue violando el propio estatuto del Fondo". "Cuando la cifra por fuga de capitales alcanzó los 86 mil millones de dólares, el propio FMI debió solicitarle al expresidente Macri que coloque controles de salidas de capitales, cosa que terminó haciendo, dejando el Gobierno con un nuevo "cepo", el cual habían prometido que no volvería más", señalaron.
Agregaron que se está "frente a la aprobación de un nuevo pacto con el Fondo, que dada la experiencia de nuestro país, sabemos que no logrará cumplir con el objetivo de 'crecer para poder pagar'". Asimismo, afirmaron que no son "ingenuos" y que "nunca" esperaron que "el FMI se volviera "keynesiano", ni que dejara de promover planes de ajuste".
Por eso, agregaron, "más allá de la aprobación de esta renegociación, creemos que el centro del debate político en Argentina es cómo tener un programa de crecimiento económico que supere las recetas fallidas de programas de ajuste y recesión".
"Tras cuatro años de 'doctrina de shock' macrista, dos años de la peor pandemia internacional del último siglo y transitando una guerra que afecta el precio internacional de las materias primas, la economía argentina necesita fuertemente crecer", subrayaron.
Si bien enfatizaron en que "las deudas deben ser honradas, y nuestro movimiento político así lo ha demostrado en los hechos pagando deudas que no contrajo, y que fueron contraídas por Gobiernos de signo ideológico opuesto", aclararon que "a pesar de nuestra voluntad de honrar las deudas, también sabemos que ajustar a los sectores de ingresos medios y bajos es por definición contraproducente con los propios objetivos de crecimiento económico que cualquier programa necesita para no fracasar".
Los signos negativos del acuerdo con el FMI según los legisladores
En otro de sus párrafos, el documento retoma una definición de Máximo Kirchner al afirmar que "los números tienen que 'cerrar con la gente adentro'", mientras que al entrar en detalles económicos vaticina que el acuerdo con el FMI provocará una caída del consumo y de la actividad económica, y por lo tanto de la recaudación, al mismo tiempo que tendrá efectos inflacionarios por las exigencias devaluatorias.
"Con estas premisas resulta imposible impulsar el crecimiento económico. Sin crecimiento económico no hay industria, ni autoabastecimiento energético, menos aún cambio tecnológico y diversificación exportadora que son las bases reales de un modelo de desarrollo sostenible con distribución de la riqueza", plantearon.
"Por todo lo expresado, entendemos que los números tienen que 'cerrar con la gente adentro' y, lamentablemente con este pacto, millones de compatriotas seguirán afuera y otros tantos más, quedarán excluidos", concluyeron en el texto.