El dueño de una distribuidora de fiambres y lácteos de la localidad de Tolosa abrió fuego durante un presunto intento de robo y mató a uno de los ladrones que había entrado al local. El adolescente, de 17 años, había entrado armado junto con un cómplice que escapó del lugar. Investigan si tenían un tercer cómplice que hacía de campana y huyó corriendo.
Según las primeras declaraciones, los dos ladrones llegaron al comercio ubicado en la calle 520 entre 11 y 12 donde amenazaron a empleados y clientes y pidieron el dinero de la recaudación y otros objetos de valor.
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Según la reconstrucción, el comerciante sacó un arma y bajó al sector de cajas donde enfrentó a tiros a los jóvenes delincuentes. En ese momento hubo varios disparos y los delincuentes trataron de escapar corriendo, aunque uno de ellos cayó en la vereda donde constataron su muerte.
Las autoridades confirmaron que la víctima es un chico de 16 años y que ya había sido detenido varias veces por otros robos, algunos de ellos con armas de fuego. El mismo dato compartieron los vecinos del lugar que aseguran haberlo visto varios veces vinculado a otros robos.
La policía científica que trabaja en el lugar busca determinar dónde se dieron los disparos. Mientras tanto, el Fiscal Álvaro Garganta caratuló la causa como Homicidio en Ocasión de Robo. Además, las autoridades buscan información de cámaras de seguridad y de testigos, ya que algunos clientes del lugar aseguran que había un tercer delincuente que también logró escapar.
Los vecinos del comerciante aseguran que el hombre que disparó estaba "cansado de los robos por lo que había tomado la decisión de tener armas".
Momentos después del crimen y cuando los vecinos se reunían en el lugar para apoyar al comerciante, familiares y amigos del delincuente que murió se reunieron en el lugar donde amenazaron a varias personas por lo que reforzaron la seguridad en la zona. Según varios testimonios, el joven delincuente pertenecía a una banda identificada con el barrio El Mercadito que está a pocas cuadras del comercio.
Con esa información, la Policía Bonaerense organizó un operativo cerrojo en la zona para tratar de encontrar al delincuente que escapó corriendo del lugar ya que quedó estacionada cerca del comercio la moto en la que habían llegado.