Una joven oficial de la Policía Federal fue asesinada este domingo de un disparo por delincuentes en moto que intentaron asaltar junto a un amigo en la localidad bonaerense de Quilmes.
El crimen, cuyos autores se mantenían prófugos, se produjo alrededor de las 7:00 y tuvo como víctima a la oficial Micaela Romero, de 23 años.
Romero acudió junto a un amigo, vestida con ropas de civil y en situación de franco de servicio, a un kiosco situado en 395 y Carlos Pellegrini, de Quilmes, cuando ambos fueron sorprendidos por seis delincuentes que se movilizaban en tres motos.
En ese momento y en circunstancias que se intentaban determinar, uno de los asaltantes realizó un disparo, que impactó en el pecho de la policía.
La joven, que se encontraba sin su arma reglamentaria, cayó gravemente herida y los delincuentes, antes de escapar, le sustrajeron su celular, al igual que a su amigo. La oficial fue llevada al Hospital del Cruce, de la vecina localidad de Florencio Varela, donde murió pocos minutos más tarde.
Tenía solo un año de antigüedad en la fuerza, a la que había ingresado en abril del 2019. Meses atrás había sido transferida a la División de Protección de la Residencia Presidencial de Olivos.