Para estimular la actividad en medio de la cuarentena, el intendente de Tigre, Julio Zamora, le presentó al gobernador bonaerense, Axel Kiciloff, una propuesta para incluir dentro del régimen de excepciones del aislamiento a unas 160 empresas de industrias de la construcción, automotriz, plástica y naval. Estas cadenas de valor, explicó la presentación, permitirían el "sostenimiento del entramado económico local".
En el informe enviado a la gobernación, las 4 industrias que pretende sean incluidas representan el 1,5% del padrón productivo y comercial local y emplean el 17% del universo de trabajadores. Además, la facturación de estas empresas representa alrededor del 50% de la recaudación de la tasa municipal de verificación de industrias y comercios.
En esa línea, Zamora detalló que la construcción sería habilitada para realizar obras privadas multifamiliares y de grandes obras, en un sector que nuclea actualmente 41 empresas y moviliza más de 600 trabajadores. En el sector automotriz se reactivarían los rubros de autopartes y metalurgia, fundamentales en el funcionamiento de las grandes plantas de producción de automóviles en el distrito, alcanzando a alrededor de 3000 trabajadores. Y el sector de las automotrices locales se centraliza en las dos fábricas que emplean a más de 6500 trabajadores y profesionales.
El documento también menciona que las 27 empresas de industria plástica establecidas en Tigre -con unos 600 trabajadores- permiten nutrir y suministrar a otras cadenas de valor locales; y que la reactivación de la industria naval pondría en funcionamiento 52 astilleros que posibilitan el mantenimiento del transporte fluvial y facilitan la conexión logística con el Delta, en un sector que abarca a 300 trabajadores.