Los entrenamientos de River son tan exigentes como los partidos. Es por esta razón que pueden ocurrir lesiones como la que aconteció en la mañana de este martes: el delantero Benjamín Rollheiser acusó un duro golpe en su rodilla izquierda y debió abandonar la práctica visiblemente entristecido por la situación. El momento fue preocupante y se le deben realizar estudios.
Cuando las cámaras estaban filmando y los futbolistas realizaban fútbol en espacios reducidos, el delantero sufrió una torcedura de su rodilla izquierda y no pudo continuar con los trabajos. De este modo, se retiró dolorido y afectado por este infortunio que muy posiblemente lo deje fuera del equipo durante algunas semanas.
De confirmarse el esguince, serán aproximadamente 21 días los que Rollheiser necesitará para recuperarse y volver a estar a disposición de Marcelo Gallardo. Si bien es habitual pieza de recambio y no ingresa en la mayoría de los partidos, es un joven que puede aportarle soluciones al ataque 'millonario' en caso de necesitarlo.