Las patronales del campo endurecen sus posturas contra el Gobierno y ya no solo planean cortes de ruta, sino que también aprietan a los camioneros y revisan su vehículos. Los manifestantes buscan intimidar a los productores para que dejen de circular sus producciones.
En el video se observa un grupo de manifestantes que se ubican en el medio de la ruta y conversan entre ellos. A la llegada de los camiones, se disponen a frenarlos e interrogarlos sobre sus cargamentos.
"¿Tenes el número del acopio?", aprietan a los camioneros, y amenazan: "Avisá a tus compañeros que no manden más camiones porque vamos a empezar a cortar". Los “controles de carga”, como llaman los agropiqueteros a la detención y allanamiento ilegal de camiones es un delito.
Javier Rotondo, presidente de la Confederación de Asociaciones Rurales de la Tercera Zona (CARTEZ), admitió que existen estos procedimientos ilegales: “Hay control de cargas en dos lugares donde los productores controlan. Coincido que es ilegal. El control de cargas no debería existir, pero no puedo manejar lo que hacen todos”.
“Que no haya una espiral ascendente de esta situación depende de los que la generaron”, agregó, en diálogo con Habrá Consecuencias, programa que se emite por El Destape Radio.
Uno de los piquetes más duros de las patronales del campo está ubicado en las afueras de la ciudad de Córdoba, en Altos Fierro, a unos 30 kilómetros al sur, en el cruce de la autovía de la Ruta Nacional 36 y la Ruta Provincial C-45. Allí, los ruralistas detienen y, sin orden de allanamiento, le abren la carga y obligan a estacionar en la banquina y no seguir su marcha.
En Córdoba el principal foco rebelde está en Altos Fierro, donde esta medianoche se montó el piquete y todos los camiones eran detenidos, sometidos al eufemístico “control de cargas”. Desde distintas entidades del campo anunciaron que a lo largo de estos cuatro días de lock out patronal, sumarán asambleas en las rutas en las zonas de San Francisco, Río Segundo, y Bell Ville.