La asunción de las nuevas autoridades en la Asamblea de Venezuela vino acompañada con la remoción de los cuadros de Hugo Chávez y Nicolás Maduro.
El presidente de la Asamblea, Henry Ramos Allup, dirigió la limpieza con la siguiente frase: "No quiero ver ni a Chávez ni a Maduro, llévenselos para Miraflores o para el aseo, pero aquí nada".
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Los retratos presidieron la sesión durante los dos años anteriores cuando la Asamblea, de mayoría oficialista, fue dirigida por el diputado Diosdado Cabello, compañero de Chávez en la sublevación militar del 4 de febrero de 1992, y número dos en el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) del presidente Nicolás Maduro.