Mientras que las grandes uniones gremiales empresarias rechazaron la doble indemnización por despido, una agrupación se mostró a favor y la justificó como paliativo ante la ola de despidos en los sectores público y privado.
"el único cepo a la creación del trabajo es la caída del consumo que provoca el Gobierno con la inflación y la baja de los salarios reales", afirmó a El Destape Francisco Dos Reís, presidente de la Central de Entidades Empresarias Nacionales (CEEN), en relación a la crítica del resto de los empresarios de que limitará las contrataciones.
Desde el CEEN afirmaron que "son urgentes medidas para defender la producción y el trabajo nacional ante el rápido deterioro económico. "Las Pymes damos trabajo a la mayor parte de la población, no especulamos con bicicletas financieras, ni evadimos en paraísos fiscales".
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La central, que reúne a pequeñas y medianas empresas de capital nacional, criticó abiertamente a las entidades que rechazaron apresuradamente el proyecto antidespidos y, en cambio, dieron su apoyo "a una iniciativa regresiva como el subsidio al primer trabajo, que no es sino una repetición de lamentables programas de flexibilización y precarización laboral". "En los 1990 esas políticas no sólo no revirtieron el desempleo, sino que dañaron severamente la productividad y la calidad laboral", recordaron.
Dos Reís señaló que la aprobación de la ley contra los despidos debe ser considerada sólo como un primer paso. Por último, exigió que el Gobierno actúe a favor de los trabajadores y que no implemente "un sálvese quien pueda que implique ahondar distorsiones y una mayor concentración y extranjerización de nuestra economía".
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