Sucedió en la provincia de Río Negro. Una mujer ofrece su riñón por internet para pagar una deuda de $300.000 que contrajo cuando fundió la panadería donde trabajaba junto a su marido.
“Sé que la venta de órganos es ilegal y más de uno me va a juzgar por esta actitud, pero realmente no encuentro otra solución. Estoy desesperada”, manifestó Ayelén Cervin a La Mañana de Neuquén.
Ayelén tiene en claro que lo que quiere hacer con la venta de órganos es ilegal y está penado por la ley, tal como se expresa en la Ley 26.066, pero su desesperación es mayor que lo que puede conllevar esa situación.
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Luego de perder su fuente de trabajo Ayelén y su esposo comenzaron a vender empanadas, medialunas y churros con dulce de leche en Ruta Chica, pero el dinero que sacan solo les alcanza para pagar el alquiler del departamento donde vive con sus hijos, de 13 y 15 años.
Durante el mes de marzo, Ayelén y su pareja alquilaron una panadería pero cinco meses después debieron cerrarla porque no les fue como esperaban. “Hubo que bajar la persiana porque ya adeudábamos un mes y medio de alquiler. Tuvimos que hacerlo porque la bola de nieve seguía creciendo”, expresó.
Tras cerrar la pareja se quedó con una deuda de 300 mil pesos, entre boletas de luz y gas impagas y la rescisión del contrato con la inmobiliaria.
“Hoy no tengo otra opción que vender mi riñón porque con los churros y las medialunas es imposible llegar a pagar esa cantidad de dinero. Además, tengo dos garantes atrás mío y no quisiera que le toquen ni los recibos de sueldo”, lamentó.
Sin embargo, Ayelén no pierde las esperanzas y junto a su marido esperan conseguir un trabajo que les ayude a paliar la situación.