Tras más de once horas, liberaron a los periodistas detenidos durante el "cuadernazo"

21 de febrero, 2019 | 08.41

Luego de más de once horas, los dos fotógrafos y los dos trabajadores de Madygraf detenidos ayer durante el "cuadernazo" organizado por la cooperativa gráfica en la zona del Congreso fueron liberados. Al salir, mostraron los numerosos golpes que recibieron durante la feroz represión de la Policía de la Ciudad.

Se trata de Bernardino Ávila y Juan Pablo Barrientos, reporteros gráficos de Página 12 y Revista Cítrica, respectivamente, y los trabajadores de Madygraf Kimey Míguez y Roberto Antonio Torres.

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Casualmente, ambos fotógrafos estuvieron cubriendo el "verdurazo" la semana pasada. Ávila fue quien capturó una foto que se volvió viral en la que se ve a una mujer mayor recogiendo berenjenas del piso mientras la Policía reprimía a integrantes de la Unión de Trabajadores de la Tierra. En imágenes capturadas este miércoles, se ve cómo los efectivos marcaron a los reporteros a dedo para que sean detenidos.

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Los trabajadores de prensa y los cooperativistas estaban acusados de "atentado y resistencia a la autoridad", acusación que no fue probada aún. "Si hubo un exceso y un actuar por fuera de lo que marca la norma le caeremos (al efectivo) con todo el peso de la ley. Pero si realmente el detenido es el autor de la agresión avalamos el accionar policial", justificó el secretario de Seguridad porteño, Marcelo D’Alessandro, quien también aseguró que las supuestas imágenes que los incriminarían "están y hablan por sí solas".

Los detenidos fueron trasladados primero a la comisaría 8 de Villa Lugano y, luego, a declarar a la Fiscalía número 17. Al ser aprehendidos, estuvieron "una hora dentro del camión" de la Policía con una temperatura de alrededor de 37 grados, contó uno de los trabajadores de Madygraf durante un móvil de C5N al ser liberado. Dentro del camión, a Ávila le bajó la presión, pero frenaron el vehículo y uno de los efectivos le compró una botella de agua.

"Estamos manifestando que queremos trabajo. No queremos otra cosa. Y que esa licitación sea para nosotros. Somos 150 familias esperando esa oportunidad de trabajar. Es lo que pedimos. Que salga a la luz la verdad de lo que pasó con esa licitación. Si hubo mano negra, queremos saber la verdad", remarcó el cooperativista Roberto Torres.

El motivo de la protesta de Madygraf tiene que ver con una licitación del Ministerio de Educación de la Nación en la cual habían hecho la mejor oferta para producir cuadernillos escolares, a pesar de estar compitiendo con importantes empresas privadas como Boldt.

En vez de dar a la cooperativa por ganadora, el Gobierno alegó que hubo errores en la entrega de la documentación y dejó la licitación sin efecto. Ahora, abrirá una licitación exactamente igual, pero la competencia ya sabe qué números manejar para realizar la mejor oferta.

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