Tragedia de Once: De la Rúa fue al juicio para saludar a la abogada del maquinista acusado

14 de octubre, 2015 | 15.05
Fernando De la Rúa asistió ayer a la primera jornada de alegatos de la defensa del maquinista Marcos Córdoba, por el juicio de la tragedia de Once. El ex presidente llegó temprano acompañado por sus custodios y, tras escuchar los alegatos de su ex abogada, Valeria Corbacho, y esperó al primero cuarto intermedio para acercarse a saludarla y platicar por un instante.

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Corbacho representa al maquinista de la formación que ese día chocó contra el andén número 2 de la estación, y que se encuentra acusado del delito de "estrago culposo por descarrilamiento". Su estrategia de defensa en el comienzo de su alegato fue en un tono de voz muy elevado cuestionar a todos los peritos mecánicos de la Justicia, según confirmaron fuentes judiciales.

La abogada es reconocida por sus defensas en casos de relevancia nacional: supo representar al expresidente Fernando De la Rúa en la causa por sobornos en el Senado, ocurridos en el 2000 para lograr la reforma laboral, así como también del policía David Villalba, sospechado de haber ayudado a liberar la zona durante el asesinato del militante del Partido Obrero Mariano Ferreyra a manos de una patota de la Unión Ferroviaria, en 2010.

Corbacho también formó parte del juicio por la represión de 2001: su defendido fue el ex subcomisario Omar Bellante, juzgado por destrucción y ocultamiento de prueba y por no haber denunciado el crimen de Benedetto ni realizado actuaciones en el momento, que hubieran permitido recolectar pruebas del hecho. Benedetto murió de un tiro en la cabeza que provino del interior del hall del banco HSBC, entonces en avenida de Mayo y Chacabuco.

También cuenta con un prontuario de defendidos que ejercieron el terrorismo de Estado durante la última dictadura cívico-militar: el exsubcomisario Luis Patti, en la causa por el asesinato de los militantes justicialistas Osvaldo Cambiasso y Eduardo Pereyra Rossi, cometido en mayo de 1983, así como también supo defender a otros tres represores: Samuel Miara, Roberto "Clavel" Rosa, y Eufemio "El Führer" Uballes, en la causa "Primer Cuerpo de Ejército", acusados por la represión en el circuito El Banco, El Olimpo y Club Atlético.