El director técnico de Boca Juniors, Rodolfo Arruabarrena y Daniel Angelici, presidente de Boca Juniors, opinaron sobre los lamentables hechos que determinaron la interrupción del clásico contra River Plate.
Arruabarena consideró que "el partido se debió haber suspendido de inmediato" y que se "tardó bastante" con la decisión de no continuar.
"Lo importante era ser solidario con los jugadores de River -señaló-. Daniel ha hablado con D'Onofrio (el titular de River). En el campo hubo mucha confusión. Acá sigue ganando la gente que no quiere que el fútbol mejore. Estamos en una situación que nos tiene que servir para mejorar en todo sentido", agregó.
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"Después de charlar con Darío (por el árbitro Herrera) yo hablo con (el entrenador de River, Marcelo) Gallardo, él me contó lo sucedido. Le dije al árbitro que si tenía que suspender el partido lo suspendiera -relató-. Es verdad que él quería continuar, la Conmebol también quería continuar. Lo más sensato era que se suspendiese", expresó.
Por su parte, Angelici adelantó que habrá "sanción ejemplificadora" para los agresores.
"Se hicieron las pericias en el estadio, tanto de la justicia ordinaria como del gobierno de la ciudad y se clausuró el estadio", argumentó el presidente de Boca Juniors.
"Hubo casi 49 mil personas, el 98 por ciento del estadio y no había habido incidentes. Me parece muy raro que en el entretiempo, cuando iba 0-0 y quedaban 45 minutos por jugar, haya un hincha de Boca que quiera perjudicar al club. Hay gente que sabe que con estas cosas se suspende el partido y que seguramente Boca tenga una sanción", puntualizó.
Ambos dirigentes coincidieron en respetar el fallo que dará mañana la CONMEBOL, incluso "si se le da el partido por ganado a River".