El periodista de Clarín, Daniel Santoro, se presentó este miércoles en los tribunales de Comodoro Py para prestar declaración indagatoria en el “caso Traficante”. El columnista está imputado por colaborar en el intento de extorsión que el espía ilegal Marcelo D’Alessio ejerció sobre el empresario Gabriel Traficante. Estuvo ante el juez federal Luis Rodríguez casi dos horas, negó los cargos en su contra y dijo que fue engañado por el agente de inteligencia inorgánico. Acercó un extenso escrito en el que pidió diversas medidas de prueba. Ahora, el magistrado deberá resolver su situación procesal.
Según informaron a El Destape fuentes judiciales, el excolumnista de Animales Sueltos respondió las preguntas que le realizaron. Confirmó que compartió un asado con D’Alessio en su casa del country Saint Thomas. También reconoció que conocía no solo al espía ilegal sino al fiscal de Mercedes, Juan Ignacio Bidone y al exespía de la AFI, Rolando Barreiro, todos procesados en este expediente por ser parte, según el juez, del intento de extorsión al empresario. Por el contrario, aseguró no conocer al espía Claudio Álvarez, otro de los imputados en esta causa que está abierta en el edificio de Retiro desde el 2016.
Tras escuchar al periodista (la audiencia no se suspendió a pesar de que el edificio de Retiro tuvo un principio de incendio y fue evacuado), Rodríguez deberá definir si lo procesa, le dicta la falta de mérito o lo sobresee. Para tomar esa decisión será clave el análisis que haga del escrito que presentó Santoro y cuyo contenido aún no trascendió. Para el magistrado existía un grado de sospecha suficiente para convocar a la figura de Clarín a indagatoria, que es el primer acto de defensa que tiene un acusado.
La imputación
El juez Luis Rodríguez le imputó a Santoro el “haber colaborado con Marcelo Sebastián D’Alessio en la extorsión ejercida bajo intimidación sobre Gabriel Traficante desde el período comprendido entre el 2 de noviembre de 2016 hasta el 9 de diciembre de 2016, aproximadamente, con el objetivo de obligarlo a que entregue distintas sumas de dinero”.
Para Rodríguez, la actividad de Santoro “para desprestigiar públicamente a Traficante y crear un grado de participación inexistente del mismo en la investigación llevada a cabo ante el fuero penal económico resultó determinante para que D’Alessio ejerciera el engaño y la presión ilícita que afectara a Gabriel Traficante, todo lo cual era coordinado con el comapreciente”, es decir, con el periodista.
El magistrado le achaca al excolumnista de Animales Sueltos el haber publicado “dos artículos en el diario Clarín, los cuales fueron utilizados por el nombrado D’Alessio para ejercer presión sobre Traficante y que éste cediera a sus pretensiones”. “Puntualmente -afirmó el juez-, D’Alessio le exigió a Traficante distintas sumas de dinero a cambio de parar el desarrollo de una ‘investigación irregular’ en su contra que tendría lugar en el Juzgado Nacional en lo Penal Económico N°6 y la Fiscalía N°6 de ese fuero, en la causa conocida como ‘la mafia de los contenedores’, como así también evitar que su nombre sea mencionado en el diario Clarín por intermedio del aquí compareciente”.
En la reconstrucción que hizo Rodríguez, el 25 de noviembre de 2016, D’Alessio, “por medio de allegados, le hizo saber a Traficante que al día siguiente se publicaría una nota en el diario Clarín vinculándolo con la mencionada causa”. Efectivamente, el 26 de noviembre de ese año, Santoro publicó en el matutino porteño la nota “Aduana: investigan si un millonario es el jefe de la banda del cuñado de De Vido”. Allí, el periodista describió a “Traficante con la misma información con la que D’Alessio intimidara al mismo en una reunión llevada a cabo el 3 de noviembre de 2016”. En ese artículo, se “volcó información tendiente a desprestigiarlo públicamente (al empresario), todo ello destinado a que Traficante cediera a las pretensiones de entrega de dinero”.
La mecánica se repitió el 9 de diciembre del 2016. En esta ocasión, de acuerdo a la investigación judicial, vía la nota “Mafia de la Aduna: la Justicia busca ahora a ‘Mister Corea”, donde “Traficante es mencionado nuevamente como vinculado a la investigación del fuero penal económico”.
En su indagatoria, según pudo reconstruir este medio, Santoro dijo que fue embaucado por el espía ilegal.
Tras escuchar al periodista y leer el escrito que presentó, el juez deberá tomar una decisión para definir la situación procesal del periodista, que ya fue procesado en una causa por espionaje ilegal que tramita en la justicia federal de Dolores. Allí, el juez Alejo Ramos Padilla le adjudicó un rol importante en, al menos, dos delitos cometidos por D'Alessio (casos Brusa Dovat y Cifuentes). Pasajes de ese expediente se acumularon a la causa que tramita en Comodoro Py.
El caso Traficante
El caso Traficante se sustancia desde 2016 en los tribunales federales de Comodoro Py. Allí, Rodríguez investiga la extorsión de la banda de D’Alessio (quien ya fue procesado en este expediente) al empresario Traficante.
En ese marco, el magistrado había tomado distintas medidas de prueba como requerir al diario Clarín copia de todas las notas vinculadas con el empresario o “la mafia de los contenedores” realizadas en ese medio por Santoro desde el 2 de noviembre de 2016, que es cuando circunscribe el juez el inicio de la maniobra delictiva contra Traficante
El rol del periodista del diario porteño está bajo la lupa del juez desde hace meses. En el procesamiento de D’Alessio, del 6 de marzo pasado, por ejemplo, Rodríguez dedicó más de un apartado al rol que le adjudica a Santoro en la maniobra delictiva.
Algunos de los pasajes más duros de aquel escrito fueron los siguientes:
-“D’Alessio comenzó haciendo alusión ante Traficante de un estrecho vínculo con Daniel Santoro, periodista del diario Clarín, para luego expresarle que aquél poseía datos suyos y de su familia para escracharlo. Todo ello seguido con que le adelantó con un día de anticipación que saldría una nota atribuyéndole responsabilidad en el expediente criminal aludido, lo que efectivamente sucedió”.
-“En la nota del mentado periodista se incorporan datos con los cuales D’Alessio amedrenta previamente a Traficante, como los nombres de fantasía de sus empresas, un presuntamente falso estilo de vida y un grado de participación en la causa a cargo del magistrado Aguinsky hasta hoy inexistente”.
-”Vale destacar el abismo que existe entre lo que surge de aquellas manifestaciones en el expediente y lo que afirma el periodista Daniel Santoro en su nota titulada ‘Aduana: investigan a un millonario es el jefe de la banda del cuñado de De Vido’”.
- “En términos estrictamente probatorios, se ha logrado determinar que la imputación de Traficante como cerebro de la mafia de los contenedores no era real y que el vínculo de D’Alessio con el periodista Santoro existe y ha subsistido pese a la iniciación de esta denuncia en su contra a fines de 2016”, se lee en el procesamiento del extorsionador.
Ahora, Rodríguez deberá resolver si tal como sospecha (por eso la citación indagatoria), Santoro fue parte importante del intento de extorsión o fue engañado por el espía ilegal, como argumentó el periodista en su defensa. El caso que tramita en Dolores es un mal antecedente para el excolumnista de Animales Sueltos. Resta saber cuán determinante.