La ola de despidos llegó a la planta que la curtiembre Sadesa S.A. posee en la localidad santafesina de Las Toscas. En esta ocasión, por problemas comerciales por la caída de las exportaciones de su producto la empresa decidió cerrar su fábrica y echar a 150 trabajadores. En septiembre pasado, el por entonces candidato a presidente Mauricio Macri visitó la planta que la empresa tiene en Esperanza, Santa Fe.
Elabora suelas, un producto que ya no se consume mucho en el mundo y que no puede competir contra los precios del mercado mexicano, que al ser más baratos se venden en mayor cantidad. Por ese motivo, en los últimos cinco años cayeron drásticamente las ventas de la multinacional.
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En consecuencia, la empresa tomó la decisión de echar esta semana entre 60 y 70 trabajadores y en el plazo de 20 días desvincular al resto. "El viernes tenemos otra reunión para negociar la posibilidad de que haya un inversor que quiera comprar la empresa", contó a El Destape el secretario general del Sindicato de la Industria del Cuero y Afines del departamento de General Obligado, Santa Fe, Alejandro Delsin.
Actualmente solo tienen trabajo el 70% de la planta, mientras que el resto asiste a cumplir horario pero sin tareas puntuales. "El 70% está todavía con producción porque el jueves descargaron cueros en las piletas y por 30 días tenemos trabajo. Como no trajeron más materia, prima el resto que hace el trabajo antes del curtido van a la fábrica pero no tiene trabajo asignado", explicó Delsin.
El gremialista explicó que en este conflicto intervino el Ministerio de Trabajo de la provincia, pero no así a nivel nacional. "De parte del gobierno nacional no obtuvimos ninguna respuesta", denunció Delsin. Además, expresó su molestia porque esta actitud de la empresa no condice con la de hace 45 días cuando al sindicato le dijeron que no estaban en riesgo las fuentes de trabajo.
"Estamos en un estado de alerta porque la empresa informó el cierre de la planta. Este fin de semana informaron que tenían que reducir el porcentaje de la planta a la mitad, lo que representa entre 60 y 70 personas echadas", contó Delsin.
En contraposición a este panorama, Sadesa S.A. tiene dos plantas más, una en la localidad santafesina de Esperanza y otra en la localidad bonaerense de Lomas de Zamora, y en estas no corren riesgo la producción ni los puestos de trabajo. "No tienen problemas porque funcionan hasta haciendo horas extras. En esas plantas invierten plata y trabajan sin problemas. Se dedican al calzado deportivo, tapicería de auto y de muebles. No es un tema económico sino de mercado que lleva a la reducción del personal en la planta de Las Toscas", detalló Delsin.
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