En el marco de su gira europea, Alberto Fernández llegó a España para reunirse con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quien respaldó la renegociación de la deuda externa argentina. En ese contexto, el mandatario argentino le adelantó a su par español quién será el nuevo representante argentino en ese país, el segundo con más inversiones en el nuestro, detrás de los Estados Unidos. Finalmente, Alberto le informó a Sánchez, y luego al rey Felipe VI, que el dirigente y ex diputado radical Ricardo Alfonsín ocupará este puesto.
Según informaron fuentes oficiales, “Ricardito” fue elegido especialmente para conducir la diplomacia que trabaja en la sede de Fernando El Santo, a dos cuadras del distinguido Paseo de la Castellana.“Queremos un político que muestre la apertura y el diálogo de nuestro gobierno”, aseguraron desde el Gobierno hace algunas semanas.
En distintas oportunidades, Alfonsín había dicho que no iba a aceptar ningún cargo en el gobierno de Alberto Fernández. Sin embargo, el dirigente radical parece haber cambiado de opinión y, de esta manera, el oficialismo logró su objetivo.
Hijo Raúl Alfonsín, el primer presidente luego del regreso de la democracia, "Ricardito" ocupó distintos roles relevantes en la Unión Cívica Radical. Fue candidato a presidente en 2011, ocupó la jefatura del bloque de Diputados y presidió el Comité de la Provincia de Buenos Aires. En los últimos años manifestó severas críticas al acuerdo realizado con el PRO y al rumbo del gobierno encabezado por Mauricio Macri. También fue un fuerte opositor a la conducción del Comité Nacional encabezada por el ex gobernador de Mendoza y actual diputado nacional, Alfredo Cornejo.
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