Ante la pandemia del coronavirus, está en debate la creación de un impuesto a las grandes fortunas a nivel nacional. En la ciudad de Castelli en Provincia de Buenos Aires, el intendente Francisco Echarren decidió conversar con el sector rural para cobrarles un impuesto, con el objetivo de juntar fondos para los hospitales.
En una entrevista en El Destape Radio, Echarren contó que la Justicia de Castelli tomó una importante decisión y desestimó una causa contra el impuesto a las grandes riquezas: "Judicializaron el impuesto a las fortunas y ayer la Justicia les dio el golpe de gracia. En una sentencia muy dura desestimó el pedido de suspensión de este impuesto".
Anteriormente, el intendente reveló que tuvieron "una resistencia fenomenal de parte de unos productores agropecuarios, pero también son dirigentes políticos". "Desde Carbap (Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa) me trataron de rastrero por este impuesto a las fortunas y cuando lo tratamos en el Concejo Deliberante no fueron los concejales de Cambiemos", afirmó.
En las últimas semanas, "un productor presentó un amparo ante una jueza que tiene 4.000 hectáreas de campo". "Ellos esperaban que la Justicia fallara en contra del interés público y la salud", afirmó Echarren sobre el objetivo del "sector mediático con el sector empresarial rural y el sector judicial juntos". Sin embargo, la respuesta por parte de la Justicia los tomó por sorpresa.
El intendente de Castelli habló sobre cómo se está llevando a cabo la contribución."Hace casi 20 días, cuando se discutía cobrarle un impuesto a los que más tienen, comenzamos a conversar con el sector rural para juntar fondos para nuestro hospital", comenzó diciendo.
"En Castelli tenemos 534 productores alcanzados por el impuesto a la riqueza y con eso podemos equipar el hospital", aseguró Echarren y admitió que "es nada lo que les cobramos, no les mueve el amperímetro a sus patrimonios".
Sobre los productores agrupecuarios que se posicionan en contra, afirmó: "En Castelli es lo mismo el que tenga OSDE que el que no, lo insólito es que el mismo productor que no quiere pagar va a ese mismo hospital que queremos arreglar". "Los que más tienen hacen lobby en contra de la salud, ¿de qué te sirve tener 5.000 hectáreas si luego tenés un problema y no hay un respirador?", enfatizó.