El Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) fue postulado al premio Nobel de la Paz por Karina Batthyány, secretaria ejecutiva del Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (Clacso), y Alejandro Villar, rector de la Universidad Nacional de Quilmes (UNQ). Se les reconoce su trabajo en “el ámbito de la ciencia aplicado a conocer la verdad y colaborar con la justicia”.
"Estamos muy agradecidos por la postulación, que nos tomó por sorpresa. Si llega a prosperar vamos a compartirlo con todo el movimiento de derechos humanos en Argentina", afirmó a Télam Luis Fondebrider, fundador y director ejecutivo del EAAF.
El EAAF es una organización científica, no gubernamental, sin fines de lucro, fundada en la Argentina en el año 1984, que ya trabajó en más de 60 países y actualmente tiene 23 proyectos activos en los que trabajan con víctimas de desapariciones forzadas; violencia étnica, política, institucional, de género y religiosa; desapariciones actuales; narcotráfico; trata de personas, crimen organizado, procesos migratorios; guerras y conflictos armados; accidentes y catástrofes.
En Argentina buscan identificar a los desaparecidos durante la última dictadura militar. El equipo de antropólogos ya recuperó 1600 cuerpos e identificó a 870, mientras que hay otros 800 que aun intentan identificar mediante muestras de sangre de los posibles familiares.
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Fondebrider contó que su organización "forma parte de una sociedad civil", que su trabajo forma parte del trabajo por "Memoria, verdad y Justicia" desarrollado, y que toman la postulación con calma porque están "con los pies sobre la tierra". Su labor se sustenta en los principios de los Derechos Humanos, del derecho humanitario internacional y, fundamentalmente, en el respeto por el derecho individual y colectivo a la identidad, la verdad y la justicia.
"El EAAF es una institución modelo no solo en la Argentina, donde nació hace algo más de 35 años, sino también en los cinco continentes. Creado por iniciativa del antropólogo estadounidense Clyde Snow, se destaca por sus logros científicos, pero especialmente por el costado humano que los identifica, el hecho de acompañar a los familiares desde la denuncia y la investigación hasta la posible resolución del caso", afirmó Batthyány, socióloga uruguaya y secretaria ejecutiva de Clacso.