En un nuevo capítulo del enfrentamiento entre el juez federal Claudio Bonadio y los ex funcionarios del kirchnerismo, el magistrado procesó al ex jefe de Gabinete Aníbal Fernández, al gobernador de Tucumán, Juan Manzur, y al ex ministro de Salud Daniel Gollán, por supuestos sobreprecios e irregularidades en el Plan Qunita, destinado a proveer distintos insumos para mujeres embarazadas y madres recientes.
Fuentes judiciales informaron a la agencia DyN que el magistrado los procesó por los supuestos delitos de "fraude", "abuso de autoridad" y "violación de deberes de funcionario público". La denuncia había sido formulada por la dirigente del oficialismo, Graciela Ocaña.
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El juez procesó a su vez a otros 20 funcionarios y mandó a trabar un embargo para cubrir la suma de 440 millones de pesos.
El Plan Qunita fue presentado en julio pasado por la entonces presidenta Cristina Kirchner en Tecnópolis y constituyó la distribución de unos 150 mil kits para bebés que habrían costado al Estado unos 1.100 millones de pesos, pero al poco tiempo fue denunciado por supuestos sobreprecios y adjudicación 'a dedo'.
Según el magistrado, cada uno de los kits, que incluían cunas, sonajeros y otros productos, tenían un valor de referencia de 4.500 pesos aproximadamente, de acuerdo a estimaciones del ministerio de Salud y la SIGEN. Sin embargo, el costo final habría sido de 7.700 pesos cada uno.
El juez Bonadio tiene una larga lista de causas contra funcionarios del kirchnerismo. Recientemente, proceso al ex secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, por el cotillón que decía "Clarín Miente" que se mostró en una misión comercial a Angola. Para el magistrado, se trató de "incitación al odio".
También allanó las oficinas de la AFSCA, cuando su entonces titular, Martín Sabbatella, se negaba a renunciar para dejar su cargo a los funcionarios macristas.