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"Está complicada la situación porque a algunos le faltan un par de botines, que es lo esencial para venir", comentó Carlos Gil, ex entrenador de Agüero a El Destape. En el club, además de fútbol, se dictan clases de zumba, judo, karate, taekwondo y asisten alrededor de 200 chicos y chicas. "No tenemos pelotas ni herramientas para entrenar bien", explicó David Gallo, entrenador de la categoría 2006 de fútbol.
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"Agüero fue el único que llegó a Primera de todos los que pasaron. Era un pibe buenito, muy compañero y le gustaba hacerse amigo de todos", recordó Gil, quien entre 1995 y el 2000 fue delegado general de todas las categorías. "Siempre de delantero, pero de momentos era jugador de toda la cancha. Te arrancaba de abajo, llegaba al área y te convertía goles", detalló con nostalgia. "Ya te dabas cuenta que era diferente", confesó.
Un club de barrio no es solo un lugar a donde chicos y chicas van a practicar un deporte. El mayor valor de lugares como el 20 de Junio, que cobra una cuota de 25 pesos, es su función social. "Lo importante es darle una contención a los chicos y que practiquen un deporte", destacó Gil.
Osvaldo Leyro, delegado general de todas las categorías del Club 20 de Junio, afirmó: "Con las nuevas boletas nos movieron la estanteria porque no sabiamos cómo manejarnos". "Lo primero que se nos vino a la cabeza cuando llegó la boleta son los chicos que pueden quedar en la calle", sentenció. Pese a que el Gobierno anunció que habrá una tarifa social para los clubes de barrio, Leyro negó que les hayan hecho esa propuesta y cerró: "Acá se lo llevó todo el viento y los clubes no tienen ningún beneficio".
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