El juez de la Corte Suprema Carlos Fayt cumplirá 97 años en febrero de 2015. Para entonces, si la oposición sigue obstinada en su plan de no acompañar a ningún candidato que promueva el Ejecutivo como dicta la Constitución, en el máximo tribunal de la Argentina habrá cuatro jueces, ya que la renuncia de Raúl Zaffaroni se hará efectiva el 1º de enero. Entre los constitucionalistas, se dividen las aguas sobre la continuidad o la necesidad de un alejamiento por parte del juez. Para unos es "un patriota" y puede mantenerse en el cargo sin inconvenientes. Para otros, su avanzada edad podría ser un escollo.
La salud de Fayt es cada día más frágil. Por su avanzada edad y sus cada vez más frecuentes problemas de salud, el magistrado asiste muy poco a Tribunales y la mayor parte del tiempo trabaja desde su casa de Recoleta. El trabajo diario recae en sus principales asesores, Pablo Hirschman y Cecilia Hockl.
En diálogo con El Destape, el constitucionalista Roberto Boico opinó que "el ritmo que la Corte tiene como tribunal exige una atención y predisposición acorde con esas responsabilidades", aunque evitó referirse al estado de salud del magistrado: "Creo que Fayt tiene una edad sumamente longeva, pero no me arriesgaría a decir si está o no en condiciones, no puedo ser árbitro de eso". Para Boico, "el trabajo de los asesores acompaña pero cuando se transforman en los que redactan y deciden es una situación complicada".
"La reforma constitucional de 1994, cuando previó la renovación de los acuerdos a los 75 años, tuvo un criterio racional, que es que cuando una persona llega a cierta edad puede no estar en sus cabales", sostuvo el abogado, y agregó: "En términos objetivos,es preferible que haya jueces un poco mas jóvenes". Sin embargo, aclaró que sobre Fayt no pesa "ninguna objeción, denuncia o critica sobre su funcionamiento como miembro de la Corte".
Por su parte, el constitucionalista Gregorio Badeni, que fue su defensor en el juicio político que se le inició en 2002, aseguró a El Destape que Fayt "está en condiciones de trabajar y puede desempeñarse como un juez de la Corte Suprema", pero reconoció que "es cierto que asiste muy poco a Tribunales por razones de salud". Según Badeni, el supremo trabaja desde su casa y Hirschman se encarga de llevarle los expedientes para que los firme.
Badeni sostuvo que "algunos especulan con el deceso de Fayt", sobre todo por la composición actual y futura de la Corte, que en caso de que ocurriera quedaría solo con tres miembros. Sin embargo, estuvo presente en el acto en el que la Academia Nacional de Periodismo le otorgó al veterano magistrado la Pluma de Honor y aseguró que lo vio "muy bien".
El que no ahorró elogios hacia Fayt fue Daniel Sabsay, célebre en los últimos días por desafiar a la presidenta Cristina Kirchner a mostrarle su título de abogada. Para el constitucionalista, "lo que está haciendo Fayt, a pesar de ser muy anciano, es digno de un patriota", ya que considera que "la República vive una situación de emergencia".
"Me parece maravilloso. No podemos juzgar su situación de salud ni su edad porque hay un derrumbe de la República y la Corte es una luz de esperanza", le dijo Sabsay a El Destape y agregó: "Por eso creo que debe continuar, al menos por unos meses; en octubre de 2015 se terminó el problema".