Después de haber recibido más de 20 denuncias por acoso sexual, Plácido Domingo emitió un comunicado en el que aceptó toda la responsabilidad por lo sucedido y pidió perdón a todas las mujeres "por el dolor que les causó". El tenor español había negado rotundamente estas acusaciones y, en su momento, dijo que “nunca he atacado a una mujer, nunca me he sobrepasado, no va con mi educación ni con mi manera de ser. Tampoco he abusado de mi poder en ningún teatro”.
Ahora, Domingo se mostró más reflexivo y, en el texto difundido, admitió que está arrepentido por las distintas situaciones de acoso que protagonizó: "En los últimos meses me he tomado tiempo para reflexionar sobre las acusaciones que varias colegas han hecho contra mí. Respeto que estas mujeres se sintieran por fin lo bastante cómodas para hablar, y quiero que sepan que lamento de verdad el dolor que les causé. Acepto plena responsabilidad por mis acciones, y he aprendido de esta experiencia”.
"Comprendo ahora que algunas mujeres podrían haber tenido miedo a expresarse con sinceridad debido a una preocupación sobre que sus carreras se vieran afectadas negativamente si lo hacían. Aunque esa nunca fue mi intención, nadie debería tener que sentirse nunca de esa forma", continuó diciendo el tenor y dijo que está "comprometido con influir en un cambio positivo en el sector de la ópera para que nadie tenga que pasar por esa misma experiencia". "Es mi ferviente deseo que el resultado sea un entorno de trabajo más seguro para todos en el sector de la ópera, y espero en el futuro que mi ejemplo inste a otros a hacer lo mismo”, remarcó.
El comunicado de Domingo fue en respuesta al informe presentado por el Sindicato Estadounidense de Artistas Musicales en el que se detallaron los casos de 27 personas que dijeron haber sufrido acoso sexual o presenciado un comportamiento inapropiado del superastro cuando ocupaba posiciones de poder en la Ópera Nacional de Washington y en la de Los Ángeles.
La mayoría de las mujeres que acusaron a Domingo eran jóvenes y comenzaban sus carreras en esa época e hicieron referencia a incidentes que sucedieron en la década de 1980 a la de 2000.
En el informe se presentaron acusaciones de contacto físico no solicitado que iba desde besos en la boca a manoseos, llamadas telefónicas en las que Domingo pedía a las mujeres que fueran a su casa e invitaciones persistentes para que fueran con él a eventos sociales. Además, dos de las mujeres dijeron a los investigadores que tuvieron relaciones sexuales con Domingo porque se sintieron obligadas a ceder por su posición de autoridad y su capacidad para dañar sus carreras.