Según la denuncia del ex fiscal Nisman,Yrimia es uno de los supuestos agentes de la Secretaría de Inteligencia que operó para encubrir la pista iraníen el atentado a la mutual judía. Sin embargo, fuentes judiciales aseguran que lejos de ser un espía, se trata de un cuestionado ex magistrado, fanático de la "mano dura" y con vínculos con las fuerzas de seguridad y la embajada de Estados Unidos. Perfil de un hombre que supo ser miembro de la Justicia, candidato a diputado nacional, negociador en una fallida tomas de rehenes y "especialista" en temas de seguridad.
Héctor Luis Yrimia es abogado egresado de la Universidad del Salvador, especializado en derecho penal y marítimo. En su currículo, el ex juez resalta su entrenamiento en agencias de seguridad norteamericanas: desde la DEA, el FBI, SWAT y el Servicio Secreto, hasta prácticas con las fuerzas policiales de los estados de New York, Florida, Boston y Texas.
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Un ex colega dijo a El Destape que Yrimia no solo se entrenó con fuerzas de seguridad estadounidense en el pasado sino que también tenía contactos con la embajada ese país. Además, lo definió como un "fanático de la mano dura yanqui".
Las experiencias en el país del norte le sirvieron para fundar la organización Dacssi (Defensa de Activos Críticos mediante Sistemas de Seguridad Inteligentes) y proclamarse un "especialista" en temas de seguridad. Desde esa fundación publicó un manual sobre procedimientos en toma de rehenes.
Fue fiscal federal en lo Criminal y Correccional entre 1993 y 1994. Llamativamente, en solo un año fue ascendido a juez de instrucción en lo Criminal. De hecho, fue el primer fiscal que tuvo la causa AMIA. Su actuación en la investigación del atentado a la mutual judía duró solo 4 meses.
Durante 10 años fue magistrado hasta que en 2004 fue denunciado por encubrir un caso de tortura contra el ex magistrado Pablo Bruno. Ex compañeros de la Justicia sostienen que las irregularidades en la carrera de Irymia no son una sopresa, sino que "son abundantes y variadas".
En 2003, la Cámara de Apelaciones lo apartó de la causa en la que había sobreseído al ex presidente Fernando de la Rúa por contrataciones irregulares en comedores municipales. En febrero del año siguiente, la Comisión de Disciplina del Consejo de la Magistratura resolvió sancionarlo por varias irregularidades en una causa en la que el ex juez ordenó la detención de una gerenta del banco Galicia que se negó a entregarle un depósito en dólares a un cliente. Sin embargo, el punto más controversial de su carrera ocurrió unos años antes.
El 3 de marzo del 2000, una toma de rehenes que se inició en Villa Urquiza terminó de forma trágica en la Paternal. Yrimia, quien oficiaba como juez de turno, se acercó al lugar donde dos delincuentes tenían rehenes y se autoproclamó presidente del comité de crisis. Fue él quien ordenó disparar a los francotiradores del Grupo Especial de Operaciones de la Policía Federal. Los dos delincuentes terminaron muertos, tres policías lesionados y un rehén terminó gravemente herido.
Luego del operativo, Yrimia le contaba orgulloso al diario Página 12 el balance de su accionar: "Terminó mejor de lo que calculaba. Pudo haber habido un rehén muerto, por eso digo que ayer Dios fue mitad policía y mitad juez".
El ex magistrado también incursionó en la política. En las elecciones de 2009, fue candidato a diputado nacional por el Partido de la Ciudad. Su campaña se basó en temas de seguridad, su "especialidad". Yrimia aseguraba que "la delincuencia es una enfermedad" que si no es combatida "se expande y puede cubrir toda la geografía". Obtuvo 3259 votos.