Por Ezequiel Orlando
Redacción "El Destape"
Los U$S 5.700 millones que las cerealeras le prometieron liquidar al gobierno antes de fin de año están en jaque por la parálisis del puerto de Rosario, uno de los canales principales por donde se envían los granos al exterior. Si bien los disparadores aparentan ser laborales, se trasluce una veta de interés económico en el conflicto.
En la Terminal Puerto Rosario, el conglomerado oleaginoso santafesino Vicentín y la logística chilena Expreso Ultramar cuestionan diferencias de aportes. Sin embargo, en el Ministerio de Trabajo sospechan que las empresas no quieren arreglar para obtener un procedimiento preventivo de crisis que los habilite a conseguir subsidios y suspensiones. En el fondo conjeturan en la cartera de Carlos Tomada que buscan obtener beneficios fiscales y despedir a alrededor de 60 personas.
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Además de ello, en la compañía Servicios Portuarios se presenta un problema intersindical. Allí un dirigente gremial fue despedido, pero retomado tras la declaración de la conciliación obligatoria. Hoy finaliza este período de gracia, por lo que el gremio piensa que van a volver a echarlo.
Ante esta situación, desde las 6 comienza un paro de los trabajadores portuarios y se prolongará por tiempo indeterminado. "Iniciamos esta medida de fuerza y esperamos reunirnos con las autoridades para llegar a un acuerdo", dijo Alfredo Palacio, titular de la Unión de Recibidores de Granos y Anexos de la República Argentina (URGARA), a la agencia Reuters.
En otro capítulo, cerca de 400 empleados habían parado el lunes porque Cargill contrató a trabajadores no agremiados en el Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros de Rosario (SOEAR) en sus plantas. No obstante, el martes suspendieron la medida por abrirse una mesa de negociación entre la parte sindical y la patronal que tendrá lugar el jueves con el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich.
A fines de octubre, las cerealeras se comprometieron a ingresar unos U$S 5.700 millones en el último trimestre del año. Estos diferendos pueden dificultar que lo cumplan en los plazos pautados pese a que en los últimos días se aceleraron las liquidaciones. La semana pasada los complejos agroexportadores vendieron U$S 611 millones, 83,8% superior que en el mismo período de 2013 y un 62,7% más que los U$S 357 millones de los cinco días previos.
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