Seis diputados del bloque del Frente para la Victoria denunciaron al ministro de Finanzas, Luis Caputo, por su rol en distintas empresas offshore, revelado a través de los Paradise Papers. El ministro fue acusado de omisión maliciosa, negociaciones incompatibles con el ejercicio de funciones públicas, tráfico de influencias, uso de información privilegiada, incumplimiento de los deberes de funcionario público y lavado de activos.
Recientemente, se reveló que Caputo manejó otro fondo offshore, Argentina Alto Global Fund LTD, con sede en las Islas Caimán, que compró títulos de la deuda del país en default y luego ganó gracias a la renegociación de la deuda que llevó a cabo el propio Caputo como secretario de Finanzas en 2016.
De acuerdo a la denuncia, Caputo omitió en su DD.JJ. ante la Oficina Anticorrupción a las sociedades. Además, en el currículum vitae cargado en la página web del Ministerio de Finanzas ocultó su intervención como administrador de este entramado offshore.
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Los diputados sospechan que esta omisión “podría haber sido utilizada para evitar que se investigara la posible participación accionaria del actual ministro en sociedades cuyo capital podría provenir de fuentes ilícitas” y “para garantizar que, desde la cartera de finanzas, Caputo pudiera operar o beneficiar a estos fondos sin que saliera a la luz su incompatibilidad para realizar tales negociaciones”, en alusión a la participación del Ministro en el pago a los fondos buitres.
Los Paradise Papers revelaron que Caputo participó en Noctua Partners LLC, al cual renunció cuando asumió el 10 de diciembre de 2015 en la función pública. Ahora, se supo que también formó parte de otro fondo buitre, Argentina Fund Ltd., que compró deuda defaulteada a bajo precio y ganó dinero con la renegociación de la deuda que hizo su propio gobierno.
Con el antecedente de la "doctrina De Vido-Boudou", cualquier funcionario imputado en una causa judicial corre serio riesgo de caer en prisión preventiva, si se respeta el fallo de la Sala II de la Cámara Federal. La causa recayó en el juzgado de Julián Ercolini, y el fiscal designado fue Carlos Rívolo.