La noticia sonó fuerte en los pasillos del estadio Monumental. Pero caló más hondo en el predio de Ezeiza: Marcelo Gallardo, el exitoso entrenador de 'La Banda', se marchaba de urgencia al sanatorio Los Arcos por un fuerte dolor en la zona renal. Y lejos de tratarse de algo que podría solucionarse con una simple receta, el DT quedó internado. En observación.
Esto encendió la alarma de los hinchas de River. Sin embargo, hay que decirlo: no se trata de una situación grave pero sí para prestar atención. Más aún si tenemos en cuenta el nerviosismo con el que pasa sus horas el 'Muñeco' dentro del establecimiento médico. Es que según pudo saber El Destape, Gallardo se quiere marchar cuanto antes mientras toma medicamentos para expulsar los cálculos. Es prácticamente un suplicio, un calvario, lo que está viviendo el protagonista hacedor de las máximas alegrías en Núñez.
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De hecho, los médicos le recomendaron al técnico que continúe en observación a la espera de una mejoría que ya comenzó a notarse en la primera noche. Sin embargo, la obsesión por su trabajo y las ganas de volver al ruedo hacen que Gallardo quiera marcharse para volver a su rutina. Pero no puede, porque su estado de salud todavía no es óptimo y él lo sabe.
Gallardo se encuentra internado en el sanatorio Los Arcos por un cuadro de cálculos renales
La insistencia por marcharse es intensa y los profesionales evaluaron la chance de darle la "libertad" que tanto anhela con una condición. "Si se va, al mínimo dolor debe regresar porque existe riesgo de operación", manifestaron fuentes cercanas al entrenador.
Por decantación, Gallardo quedaría fuera de la delegación que viajará a Santa Fe para jugar ante Unión. El partido es este domingo, a las 21:45 horas, y el DT sigue internado cuando faltan tan sólo cuatro días para este compromiso. La lógica dice que no tendría que viajar, pero tratándose del 'Muñeco' (a esta hora del mediodía del miércoles) siempre hay lugar a la duda.