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La foto del líder camionero con Macri tendrá lugar este lunes a las 17 durante un acto en La Usina del Arte del barrio de La Boca, y buscará generar impacto político ya que Moyano, si bien se mantendrá equidistante ante los comicios presidenciales, no tiene previsto compartir actividades con Daniel Scioli ni con Sergio Massa antes del 25 de octubre.
La principal lectura -avalada por colaboradores del líder cegetista- es que Macri buscará mostrar gobernabilidad y respaldo de un sector importante del sindicalismo tradicional, una debilidad que solieran exhibir aquellos dirigentes no peronistas que llegaron a la Presidencia.
"Moyano no se juega por nadie (en referencia a los candidatos presidenciales), pero esta foto va a ser picante porque él (por Macri) no es peronista. Va a ser una foto comprometedora para Scioli y Massa", evaluó un hombre de confianza del jefe sindical en diálogo con NA.
La excusa del acto será un reconocimiento del gobierno de la Ciudad a los trabajadores de la recolección de residuos e higiene urbana, donde Moyano será el invitado estrella. Acerca de la relación entre el camionero y el jefe de gobierno porteño, las fuentes moyanistas consultadas por NA indicaron que "está bien, al igual que con los demás candidatos", pero como sucede también con los otros dos aspirantes principales a la Presidencia, existe con Macri una cuota de desconfianza.
"Al final al acto va a ir sólo Hugo, sin los muchachos afiliados al gremio, porque no quieren que les copemos el acto", reveló al respecto un hombre cercano al camionero.
Otro tema que tendrá ocupado a Moyano en las próximas semanas serán los contactos que se viene multiplicando entre las distintas facciones de la CGT para unir a la central, y que se vio reflejado hace pocos días cuando se difundió una foto de una reunión del camionero junto a dirigentes de su central y de la CGT oficialista que comanda Antonio Caló.
No obstante, el moyanismo advirtió que, si bien se aspira a la reunificación, todavía persisten diferencias claras entre los distintos referentes sindicales y dieron por descontado que la tan mentada unión no se materializará, al menos, hasta el año próximo cuando ya esté en funciones el sucesor de Cristina Kirchner.
Al respecto, cerca de Moyano dijeron que no está claro si habrá otra reunión antes de las elecciones de octubre, pero sí continúan las charlas telefónicas entre los dirigentes de las dos CGT: "Se están juntado, pero no hay un criterio de reuniones periódicas", aclararon. De estas conversaciones están participando Moyano -junto a laderos como Juan Carlos Schmid y Abel Frutos- y los dirigentes de la CGT oficialista de la facción de los "independientes" - Gerardo Martínez (UOCRA) y Andrés Rodríguez (UPCN)- y de los "Gordos", entre ellos Armando Cavalieri (Comercio) y Héctor Daer (Sanidad).
Quienes permanecen apartados de estas charlas son el propio Caló y otros dirigentes sindicales que se muestran muy cercanos al kirchnerismo y fueron los primeros en apostar a un triunfo de Scioli, como Omar Viviani (Taxis) y Ricardo Pignanelli (SMATA).
Trascendió que estos hombres se mantienen por fuera debido a que buscarán posicionarse y gozar de un rol de interlocutores privilegiados con Scioli, en un eventual gobierno suyo, pero el moyanismo rechazó esa estrategia. "¿Para qué le sirve a Scioli tener el respaldo de Caló o de Viviani? Si llega a la Presidencia, se va a tener que sentar con Hugo", evaluaron los hombres de confianza de Moyano.