El programa "Crónicas de la tarde", conducido por Mónica Gutiérrez, vivió un tenso momento cuando la propia periodista y su colega, Ricardo Canaletti, cruzaron a los gritos a la abogada Mónica Chirivin por el crimen de Fernando Báez, cuando ésta aseguró que los jóvenes que se encuentran presos en el penal de Dolores “no tuvieron la intención de matar”.
La letrada había dicho que dentro del boliche Le Brique de Villa Gesell “había pogo” y que eso está prohibido, por lo que el periodista de policiales procedió a preguntarle qué tenía que ver eso con el homicidio. “Es donde empieza el problema”, sostuvo ella.
Canaletti señaló que estaba haciendo referencia a “etapas diferentes”: “Yo me puedo pelear con ella, pero de pelearme a pegarle una trompada, hay una diferencia".
Chirivin insistía en que el problema comenzaba con "la música y el pogo", a lo que el panelista le respondió con mucho sarcasmo: “Ah, prohibamos la música, es motivo de criminalidad. Lo que usted está diciendo es una barbaridad”.
Claramente del lado contrario al de su invitada, Gutiérrez le sugirió a la abogada que vaya a defender a los rugbiers, y Canaletti opinó lo mismo.
“Defiendo el derecho y que estos chicos tengan la pena justa”, gritó la letrada, que cuando Canaletti arremetió diciendo que “negro de mierda es un insulto racial”, aseguró que eso es “algo que le dicen a todos los chicos en el boliche”.
Luego de que el especialista en policiales hiciese alusión al asesinato impune de Ariel Malvino perpetuado por tres rugbiers en el año 2006, la conductora, muy ofuscada, le dijo a su invitada que “tendría que ir a defender ahora mismo” a los acusados de matar a Báez Sosa, quienes se encuentran aislados del resto de los reclusos de la Unidad Penitenciaria de Dolores.