La intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza, repudió la represión que se llevó a cabo de forma violenta contra los trabajadores del frigorífico Penta y aseguró que se está trabajando en la resolución del conflicto.
Tras una reunión en el Palacio Municipal con representantes de la Comuna, del Ministerio de Trabajo bonaerense y delegados y directivos del sindicato, confirmaron que hay voluntad por parte del municipio para poder ayudar a los más de 250 trabajadores que fueron despedidos por la empresa en medio de la pandemia por coronavirus.
En el encuentro se acordó insistir con las presentaciones legales ante el Ministerio de Trabajo de la Nación y de la provincia de Buenos Aires para encontrar una solución.
Según un comunicado oficial de la gestión Mendoza, “de ninguna manera, el Municipio de Quilmes avala la represión sufrida por los trabajadores y repudia la violencia como mecanismo de solución a este conflicto”.