La consigna es una sola: salir a cazar los votos de Massa. Pero no es fácil: saber cómo hacerlo y darles lo que quieren es más difícil que aprenderse la tabla de logaritmos de memoria. Porque tampoco son una "massa" uniforme.
Por eso creo, nunca mejor dicho que en este caso, que el 21% de votos que sacó convierten a sus seguidores en Massa Crítica.
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Es casi gracioso ver cómo desde el sciolismo dicen que están más cerca de Massa, y desde el Macrismo dicen lo mismo. Ya me imagino el debate: los dos mirando a cámara y diciendo lo mismo: "por eso te hablo a vos, votante de Massa"... lo podrían hacer a coro.
Pero no es fácil. Basta con entrar al Facebook oficial de Massa para darse cuenta que no es unánime la inclinación por uno o por otro. Está muy repartido. Flor de bolonqui tiene ahora Massa, que de alguna manera se volvió árbitro de la elección. Lo que no se sabe si va a ser árbitro tipo Castrilli o tipo Lamolina.
Habrá que apelar a la imaginación. No creo que sea buena idea para Scioli declararle la guerra al narcotráfico y entrar a los barrios más humildes, ni tampoco será buena idea para Macri prometer el 82% móvil con Melco diciéndole en segundo plano: "noooooo... eso noooo".
Ante esta situación se me ocurrió brindarles a ambos contendientes del ballotage algunas ideas un poco más originales para tratar de convencer a Sergio Massa de que vuelque sus preferencias hacia ellos. (Tampoco es la panacea: que un dirigente diga que sus votantes van a inclinarse hacia uno u otro lado da menos garantías que un repuesto de Warnes).
Pero al menos podrán intentarlo. He aquí entonces algunas sugerencias para tratar de tentar al líder de UNA:
- Conseguirle a Lavagna un quincho igualito al de De la Sota.
- Durante los próximos cuatro años Tigre entra directo a la Copa Libertadores y al mundial de clubes de Japón.
- Mudar la capital a Nordelta.
- Darle un programa de televisión en canal 7 que se llamaría: Seis, Siete, UNA.
- Poner al jugador de Tigre, Galmarini, en la selección nacional.
- Devolverle a Mónica López.
- Si no se puede en vivo, por lo menos con Photoshop, conseguirle una foto junto al Papa.
- Perdonarle, como se hacía en el colegio, todas las faltas a las sesiones del Congreso.
- El día que Reutemann vea algo que no le guste, al primero que le avisa es a él.
- Hacer tratativas con la AFIP para que lo dejen comprar dólares a precio oficial.
- Conseguirle 10 movileros que lo sigan a todos lados, pero con micrófonos con cable y cámaras que funcionen y graben de verdad.
- Para que todo el mundo lo conozca, poner a Gustavo Sáenz, su candidato a vice, en el bailando.
- En las próximas elecciones, ponerle enfrente a Insaurralde. O a Niembro... O a Filmus