El ministro de Economía, Martín Guzmán, resaltó la responsabilidad del Fondo Monetario Internacional en la crisis económica. "Lo primero que buscamos hacer fue cambiar un modelo que no funcionó", explicó el funcionario, en su exposición sobre su estrategia ante la reestructuración de deuda ante el Congreso.
El mandamás del Palacio de Hacienda consideró importante "recordar que el Fondo Monetario es responsable. Todas las partes tienen responsabilidad: Argentina, los bonistas que decidieron apostar a un modelo que fracasó, y el FMI". El economista disertó ante los diputados luego de cosechar apoyos de Alemania, Francia, España y el Vaticano en su gira junto al presidente, Alberto Fernández. Estos países se comprometieron a darle sus votos para que el Gobierno llegue a un nuevo acuerdo con el Fondo.
El funcionario marcó la pauta sobre la que guía los diálogos para renegociar el gigantezco pasivo que generó Mauricio Macri: "La restauración de la sostenibilidad de la deuda debe ser una política de Estado". Para esto, detalló que el primer paso debe ser "cambiar un modelo que no funcionó por otro, en un contexto muy duro". "Si no se cambiara el modelo económico, pero tomando ciertas medidas que ya se tomaron, recién en 2026 la economía argentina podría estabilizarse", pronosticó. Esto significa que la crisis causada por Macri se mantendría, al menos, por otros seis años. En el mejor de los escenarios planteados por Guzmán, el equilibrio fiscal volverá en 2022.
Luego de un intento fallido de canjear los bonos duales que había colocado Luis Caputo en 2018, fuentes del ministerio aclararon a El Destape que "el mercado considera al AF20 como un título en dólares, por lo tanto nosotros también lo haremos y lo incluiremos dentro de la renegociación de deuda en moneda extranjera". El Ejecutivo sólo había conseguido avales del 10% de los tenedores, quienes consideró que obraron con "buena voluntad", no así los fondos que se negaron a aceptar un papel con un perfil más sostenible. Esto incluyó a Tempelton, el gigante de inversión que apoyó al macrismo en sus emisiones internacionales.
Un modelo que chocó
Argentina profundizó la estanflación por seguir el manual neoliberal a rajatabla. El titular de Economía reconoció que "el gobierno anterior hizo todo lo que le pidió el FMI, pero no se cumplieron las premisas". "No hay peor opción que el ajuste fiscal en una recesión. Eso va a ser una premisa central", adelantó.
El ministro no olvidó en su discurso los continuos vaticinios fallidos de los economistas de Cambiemos. La gestión de Macri insistió en reducir el poder adquisitivo de los trabajadores para que los salarios no impulsen las subas de los precios, pero Guzmán les instruyó que la inflación la generaron otras variables que no tuvieron en cuenta y derivaron en un 54% el año pasado. "Resultó ser mucho más compleja que un fenómeno sólo monetario", señaló.
"Se dio un brutal crecimiento de la deuda pública sin que haya un incremento de la capacidad productiva del país", detalló Guzmán sobre la multiplicación del pasivo estatal con Cambiemos. "El país padece una carga de deuda insostenible que, de no resolverse, profundizaría el descalabro", dijo. "Los países que sufren estas crisis no salen hasta que la deuda deja de ser una carga que pisa la posibilidad de crecer", explicó el ministro.
Guzmán analizó que el "colapso de un sistema económico" golpeó principalmente a los de menores ingresos: "Los que más sufren este tipo de crisis son las personas en un estado de mayor vulnerabilidad". El funcionario económico repasó que en los últimos dos años, 465.000 argentinos han entrado en indigencia.