La gobernadora bonaerense saliente, María Eugenia Vidal, dio su último discurso ante empresarios y referentes de las finanzas en el que resaltó el proceso de transición junto a Axel Kicillof y pidió aprender de los errores qeu se cometieron.
Vidal participó de una entrevista abierta organizada por la Asociación Cristiana de Dirigentes de Empresas (ACDE), en la sede del hotel Sheraton. Según publicó Clarín, la dirigente de Juntos por el Cambio pidió "un proceso de construcción distinta" que debe "empezar por el reconocimiento del otro y por la no descalificación" porque ésta "divide entre malos y buenos y nos otorga una enorme comodidad a los que hacemos política”.
En esa línea, sostuvo: “Si no sos bueno siempre, o sos el malo siempre, tal vez no tengas razón, el otro te gane la discusión y tal vez te gane una elección. Entonces la política se vuelve algo más complejo y desafiante. A mí me encanta. Nunca quise ganar una elección porque el otro era malo sino porque yo era mejor”.
Sin embargo, perdió las elecciones ante Kicillof, con quien destacó tener un período de transición "muy correcto", ya que lograron "tener un vínculo llano y directo" para hacer el traspaso de mando y de información de cara al 10 de diciembre.
Respecto a Juntos por el Cambio y la derrota a nivel nacional, Vidal analizó: “No creo que heladera mate asfalto. Hay que entender la realidad de cada uno, sin enojarse y hacer todos los aprendizajes que hagan falta". Tras esto, analizó que "la Provincia, y en particular el conurbano, está muy impactada por la macroeconomía”, lo que influyó en la pérdida de los comicios en Buenos Aires.
La mandataria saliente estuvo junto a Gastón Bourdieu y María Elena Casanovas, del Banco Galicia; Andrés Beibe, de Corteva; Miguel Trucco, de Aysa; Ignacio Driollet, Horacio Quirós y Martín Etchevers, del Grupo Clarín y el titular de la organización y encargado de entrevistarla, Juan Vaquer, ex presidente de Dupont Sudamérica. Vidal solo estuvo acompañada por el secretario general de la gobernación Fabián Perechodnik y por el ministro de Agroindustria, Leonardo Sarquís.