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Tras el pedido para que se cuente "voto a voto" de parte del PRO, algo que será analizado en breve por el Tribunal Electoral, surgieron una serie de suspicacias cuando se mostraron unas mesas en las cuales la cantidad de votos registradas en los telegramas diferían sustancialmente con lo cargado en el escrutinio provisorio.
Sin embargo, estas situaciones suelen ocurrir y no necesariamente son una prueba indudable de que haya fraude, remarca el decano de la Facultad de Ciencia Política de la Universidad Nacional de Rosario, Franco Bartolacci. En declaraciones a El Destape, el académico sostuvo que "en el proceso electoral no hubo irregularidades ni problemas".
La UNR llevó a cabo un observatorio para controlar el comicio y del mismo se desprende, según Bartolacci, que "los problemas ocurridos en las PASO se subsanaron". "Fue una elección reñida", agregó.
Las mesas
El PRO difundió, entre otros, los resultados de la mesa 270 de la provincia, en la que Miguel Del Sel obtuvo 73 votos y quedó segundo, detrás del socialismo. Sin embargo, al cargar los datos el ex Midachi tenía 0 sufragios cargados.
Pero estas situaciones se repitieron con todos los candidatos y deberían subsanarse al hacer el recuento definitivo. Por ejemplo, en la mesa 4501 Lifschitz aparece también con 0 votos en el cómputo del escrutinio provisorio, mientras que Perotti aparece con 85 sufragios y Del Sel, con 64.
En el telegrama, en cambio, puede observarse que el candidato del FPCyS obtuvo, en verdad, 75 votos.
Lo mismo ocurre con la mesa 5485, en donde el socialismo obtuvo 82 votos pero no se le computó ninguno.
Un caso similar se da en la mesa 3246 de San Carlos. Allí Lifschitz sacó 100 votos y Del Sel, 68, pero a la hora de cargar los datos lo hicieron de manera cruzada.
Y no solo el socialismo y el PRO salieron perjudicados, sino también el FPV, como pasó en la mesa 7508 del departamento de Las Colonias. Allí, el peronista Omar Perotti tuvo 86 votos pero solo fueron computados 6.
Ahora, comenzará el escrutinio definitivo que deberá corregir estas situaciones y así llegar a un resultado preciso. En las PASO, donde el PRO se impuso también por una mínima diferencia, el recuento definitivo arrojó que la distancia se achicó a 3 mil sufragios. El final, por ahora, sigue abierto para los tres.
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