Todas las actividades proselitistas se suspendieron y mientras los kirchneristas mantienen sólo algunos actos relacionados con la gestión, los opositores comenzaron a adecuar sus funciones a la marcha del caso Nisman.
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El líder del Frente Renovador, Sergio Massa, que este miércoles anunció que pedirá ser querellante en la causa, suspendió el acto de lanzamiento de su precandidatura presidencial, que estaba previsto para el próximo 7 de febrero, según consigna la agencia NA. También debieron cancelar sus programas Mauricio Macri, que no viajó al foro económico de Davos, en Suiza, Julio Cobos, Ernesto Sanz y Hermes Binner, quien tenía pautado un viaje por Viedma, Las Grutas y Madryn y debió darle de baja.
La oposición coincide en que el desenlace que tuvo el fiscal federal modificó el clima electoral y será un "tema del que se hablará todo el año". Además, consideran que el Gobierno y los candidatos oficialistas son quienes se llevarán la peor parte, luego de que Nisman denunciara a la presidenta Cristina Kirchner, al canciller Héctor Timerman, y a otros referentes K por supuesto "encubrimiento" de Irán en el atentado a la mutual judía.
En tanto, desde el oficialismo, el gobernador Daniel Scioli fue el primero en dar su opinión sobre el episodio y suspendió sus tareas de campaña. El bonaerense redujo su agenda a cuestiones relacionadas con la gestión provincial.
Sergio Urribarri, Julián Domínguez, Agustín Rossi y Florencio Ranzazzo mantienen actividades vinculadas a sus gestiones particulares.
Desde el kirchnerismo aguardan a que la Presidenta reaparezca en público, luego de que se expresara a través de dos cartas en Facebook.
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