En una decisión esperada por sus abogados, el exministro de Planificación Federal Julio De Vido fue excarcelado en el marco de las causas Río Turbio y Gas Natural Licuado (GNL). El exfuncionario estaba con libertad domiciliaria desde el 13 de diciembre.
En declaración a Get Back (El Destape Radio), su esposa, Alessandra Miniccelli, aseguró: "Era lo que esperábamos. Ser ministro no es un delito y a Julio le imputaban esto". Además añadió: "Todavía no pude leer la resolución. Si todo está bien, ya deberíamos poder retirar la tobillera".
El Tribunal Oral Federal N°1 (TOF1) ordenó excarcelar al exministro en la causa Río Turbio y un tramo de la causa Cuadernos, en la cual se hizo referencia a GNL. Se trata del mismo tribunal que en noviembre del año pasado había beneficiado a De Vido con una prisión domiciliaria, con tobillera electrónica. El exfuncionario permaneció detenido desde el 25 de octubre de 2017 y tras la resolución podrá recuperar la libertad de manera inmediata.
"Es una aberración jurídica lo que hicieron en estos años para perseguir opositores. Las causa irán cayendo por su propio peso", expresó Minnicelli. En el caso de Río Turbio, se investiga el desvío de fondos destinados a realizar obras en la mina de carbón por al menos $ 264 millones.
En julio de 2017, el fiscal Carlos Stornelli pidió el desafuero de De Vido, acusándolos de haber firmado cientos de convenios con la Universidad Tecnológica Nacional en Santa Cruz para la reconversión de la mina y puesta en marcha de un ramal ferroviario. Se planteó que a través de los convenios se desviaron fondos públicos que terminaron en los bolsillos de distintas personas y no en el proyecto que se debía financia.
Respecto a la causa GNL, el magistrado Claudio Bonadio había dictaminado que entre 2008 y 2015 se habrían pagado sobreprecios por US$ 6.995,92 millones en el marco de la compra de cargamentos de Gas Natural Licuado realizada por Enarsa. El juez procesó a Roberto Baratta y De Vido por administración fraudulenta.
David Cohen, el perito oficial que firmó el primer informe y fue clave en las primeras detenciones del ex ministro Julio De Vido y su mano derecha Roberto Baratta, deberá enfrentar ahora un juicio oral por falso testimonio agravado.