Tras acordar la entrega de alimento para comedores y 4000 cupos en programas de empleo, se levantó el corte en 9 de Julio que encabezó el Frente Trabajo y Dignidad Milagro Sala, conformado por empresas recuperadas, movimientos sociales y sindicatos, que hoy se movilizó al Ministerio de Desarrollo Social.
Las organizaciones, a pesar del acuerdo, se retiraron insatisfechas y analizaran nuevas medidas de fuerza para continuar el reclamo por el aumento de la canasta básica de alimentos y el grave problema habitacional.
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“No hay emergencia social que pueda contener las consecuencias de una política económica que cada día arroja a la desocupación a cientos de compatriotas. El Gobierno quiere elegir con quién hablar y qué discutir. Están construyendo un Consejo de Políticas Sociales para administrar la miseria y que opere como instrumento de disciplinamiento popular; o entramos todos a discutir una agenda seria y responsable que genere trabajo y dignidad, o no sirve para nadie. No hay paz social sin justicia social”, afirmaron los organizadores, que planean terminar la protesta frente a la Secretaría de Vivienda para reclamar cambios en la política económica.
Los manifestantes, agrupados en la Confederación Nacional de Cooperativas de Trabajo (CNCT), la CTD Aníbal Verón, la Unión de Clubes y la organización Túpac Amaru, entre otras, llegaron a la cartera que dirige Carolina Stanley en el marco de una semana de protestas.
En los últimos días pasaron por allí también los integrantes de la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), que lidera el Movimiento Evita. La protesta, que se desarrolla en medio del reclamo de los docentes para llevar adelante una paritaria nacional -donde debatir una recomposición salarial que no quede subordinada a la inflación-, vuelve a poner sobre la mesa el reclamo sobre las distintas medidas económicas que afectaron los niveles de consumo e inversión: suba de tarifas, devaluación, falta de control sobre los precios y freno en la inversión pública.