Es vida. Es salud. Es indispensable para todo ser humano. El agua es uno de los recursos más preciados, necesarios y al mismo tiempo más escasos que tenemos los seres humanos. Si bien es un recurso renovable, el uso que le dan las industrias alrededor del mundo y su comercialización hacen que muchas personas no puedan acceder al agua potable: de hecho, hay 37 países en el mundo que no la tienen, y a 3 de cada 10 personas les falta el suministro en sus hogares.
Por eso, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) celebra hoy, 22 de marzo, el Día Internacional del Agua: para recordarnos que no es un privilegio sino un derecho, y lo preciada que puede resultar para aquellos que tienen que enfrentar grandes dificultades para poder beber incluso menos de un vaso por día, mientras que otros podemos simplemente abrir una canilla y tenerla a disposición.
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La ONU alerta contra la contaminación y el uso indiscriminado por parte de sectores como el agrícola, que usa el 70 por ciento del consumo de agua mundial, y también los cambios climáticos. Estos factores son algunos de los principales causantes de que nuestro recurso natural más importante en la actualidad se esté agotando.
De acuerdo a las Naciones Unidas, 663 millones de personas viven sin suministro de agua potable cerca de su hogar, “lo que les obliga a pasar horas haciendo cola o trasladándose a fuentes lejanas, así como a hacer frente a problemas de salud debido al consumo de agua contaminada”. Esta problemática se da principalmente en países del África, y afecta a los niños, niñas, adolescentes y mujeres que son los y las encargadas de buscar el agua, enfrentando grandes peligros.
Para solucionar esta crisis, la ONU decidió visibilizarla a través de esta fecha especial e insta a llevar acciones naturales como “plantar bosques, reconectar los ríos con las llanuras aluviales y restaurar los humedales”, lo cual devolverá el equilibrio al ciclo del agua y mejorará la salud pública y los medios de vida.
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