La oposición se prepara para enfrentar al Gobierno en el Senado

El año legislativo comienza con dos proyectos muy fuertes en el Senado de la Nación: la nueva ley de Inteligencia, impulsada tras la muerte de Nisman, y el pliego de Roberto Carlés para ser el reemplazante de Zaffaroni en la Corte Suprema. De no mediar ninguna sorpresa, el proyecto que crea a la AFI será aprobado con mayoría simple en la Cámara Alta, pero la Casa Rosada la tiene difícil para conseguir los dos tercios necesarios para nombrar a un ministro del máximo tribunal.

El próximo martes a las 11 de la mañana se llevaría a cabo el plenario de Comisiones entre Asuntos Constitucionales y de Justicia. Ambas están presididas por dos senadores oficialistas: la primera, por el neuquino Marcelo Fuentes; la segunda, el entrerriano Pedro Gustavino. Antes de la misma, el bloque radical se reunirá para definir una postura común del bloque en relación a ese proyecto.

En cuanto al pliego de Carlés, hasta el momento la postura sigue siendo la misma desde la firma del documento entre los senadores opositores: clausurar la discusión por el reemplazo de Zaffaroni hasta que llegue un nuevo gobierno en 2016.

En diálogo con El Destape, el radical Mario Cimadevilla dijo que "es probable" que el pliego de Carlés "termine como Reposo", en referencia al ex candidato a procurador general que no pudo pasar el filtro del Senado y tuvo que declinar. Luego, Alejandra Gils Carbó sí obtuvo el apoyo opositor para ocupar su cargo.

El senador por Chubut reiteró una posición ya repetida por Ernesto Sanz, y consideró que "no existe un clima para avanzar en la discusión de estos temas" porque "hay una fractura muy grande" en la sociedad.

Cimadevilla cree que "el clima político no es el apropiado" aunque coincide en la necesidad de "reformar los servicios de inteligencia". Y desconfía de las intenciones del Gobierno: "Ha hecho uso y abuso de servicios. Es como decirle a un abusador serial que dé un manual de cómo comportarse".

Sin embargo, dejó abierta mínimamente una puerta para negociar con el Gobierno: "hoy no por hoy no hay (consenso para hacer modificaciones). No se comunicó nadie hasta el momento. La semana que viene, veremos".

Mucho más tajante fue la integrante del Frente Cívico de Córdoba, aliada dentro de FA-UNEN, Norma Morandini, quien rechaza que se haya hecho una convocatoria a sesiones extraordinarias para febrero: "Es una distorsión legislativa que el Congreso funcione en extraordinarias. Tenemos más de eso que sesiones ordinarias", dijo.

"Si tiene una forma de legislar anormal ya invalida cualquier proyecto", sentenció y agregó: "Me niego a hacer cualquier valoración cuando se trata de temas de tal gravitación" disparó la ex periodista quien pidió que "uno se pueda dar tiempo" para el debate.

Una vez conocido el anuncio del Gobierno, el precandidato a presidente Ernesto Sanz escribió en su cuenta de Facebook que apoya una nueva ley que regule los servicios de inteligencia "pero tendrá que ser con un nuevo Gobierno" y pidió "un esclarecimiento previo de todo lo que ha ocurrido en los servicios secretos durante estos 12 años".

La discusión parlamentaria arranca antes de tiempo, cuando algunos ya comenzaban a acelerar sus respectivas campañas de cara a las elecciones (el peronista disidente Juan Carlos romero se encontró haciendo varios actos proselitistas en estos días). Sin tiempo para precalentar, la hora de jugar se acerca.