El Centro de Información Judicial (CIJ) subió a su página web la denuncia del fallecido fiscal de la causa AMIA, Alberto Nisman, contra la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, el canciller Héctor Timerman y otros integrantes del oficialismo.
En la denuncia de 290 fojas, el fallecido fiscal relata la "la intervención activa en el plan encubridor" del atentado a la AMIA y menciona, entre ellos, a Luis D'Elía, Fernando Luis Esteche, Jorge Alejandro "Yussuf" Khalil, el diputado Andrés Larroque, Héctor Luis Yrimia y un individuo identificado como "Allan", que según Nisman "ha desempeñado un rol por demás relevante en los hechos", que responde a la Secretaría de Inteligencia y, según los indicios que obtuvo, se trataría de Ramón Allan Héctor Bogado, aunque el área ya desmintió que el supuesto agente forme parte de la Secretaría de inteligencia. También se transcriben escuchas telefónicas donde, según el fiscal, se prueba el vínculo entre los funcionarios argentinos y el gobierno de Irán para encubrir el atentado a la sede judía.
El escrito de la Unidad Fiscal de Investigación para la causa AMIA, presentado ante el Juzgado Federal N° 4, a cargo de Ariel Lijo, tiene por objeto "denunciar la existencia de un plan delictivo destinado a dotar de impunidad a los imputados de nacionalidad iraní acusados" por la voladura del edificio de la mutual judía en 1994, con el fin de que "eludan la investigación y se sustraigan de la acción de la Justicia argentina".
"Esta confabulación ha sido orquestada y puesta en funcionamiento por altas autoridades del gobierno nacional argentino, con la colaboración de terceros, en lo que constituye un accionar criminal configurativo, a priori, de los delitos de encubrimiento por favorecimiento personal agravado, impedimento o estorbo del acto funcional e incumplimiento de los deberes de funcionario público", sentenció el fiscal, que consideró que esta situación "resulta de la mayor gravedad teniendo en cuenta que el hecho cuyo encubrimiento se denuncia ha sido declarado crimen de lesa humanidad y calificado como genocidio".
Según Nisman, "la decisión deliberada de encubrir a los imputados de origen iraní" acusados por el atentado "fue tomada por la cabeza del Poder Ejecutivo Nacional, Dra. Cristina Elisabet Fernández de Kirchner, e instrumentada, principalmente, por el Ministro de Relaciones Exteriores y Culto de la Nación, Sr. Héctor Marcos Timerman".
Nisman precisa además, en la introducción de la denuncia, que "para la época en que se urdió e instrumentó el plan criminal, la urgencia energética que atravesaba y atraviesa nuestro país y el anhelo por restablecer plenas relaciones comerciales a nivel estatal, ligados a una visión geopolítica de acercamiento con la República Islámica de Irán fueron, según las pruebas con que se cuenta, los factores determinantes" para que la Presidenta, "con la necesaria e inestimable participación y colaboración" del canciller Timerman "tomara la aciaga decisión de llevar adelante este plan de impunidad, sacrificando la justicia en el caso AMIA".
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