La industria del cuero en emergencia: se desplomaron las exportaciones de zapatos

14 de diciembre, 2014 | 08.00
Por Lorena Hak
Redacción El Destape
lhak@eldestapeweb.com


La tendencia negativa de la industria del calzado de cuero viene de hace tiempo, según indicaron a El Destape desde la Cámara Industrial de las Manufacturas del Cuero (CIMA). En el 2013 se exportaron 6.103.000 unidades, representando 28.917.000 dólares, mientras que en el 2012 habían sido de 8.764.000 unidades, por 36.628.000 dólares.

En el primer trimestre de 2014 las exportaciones fueron 1.394.000 medidas en unidades, lo que representó 6.017.000 dólares, mientras que en el mismo período del 2013, habían sido 1.796.000 unidades, equivalentes a 7.518.400 dólares, lo que da una proyección para 2014 de 5.576.000 unidades y 24.200.000 dólares.

La caída de las exportaciones de los productos argentinos –que deben pagar un 25% de derechos de exportación-, pierde espacio frente al cuero con mínimos procesos de curtido, que tiene ese impuesto en un 5% y un 2% de reintegro. "Falta un estímulo para el producto manufactrado", dijo a este medio el presidente de CIMA, Daniel Donikián.

Pero más allá de que el conflicto en la cadena es "histórico", la coyuntura internacional derivó en un cuello de botella que perjudicó a un rubro reconocido a nivel mundial: los productos de cuero argentino. "Es la demanda externa la que convalidó los precios altos, y nos hizo perder el mercado externo. Las ventas al mercado automotriz, impulsaron el aumento. Entonces se termina el cuero en China, con costos más bajos", graficó Donikián.

"La actual estructura de Derechos de Exportación permite la provisión de materias primas sólo para la industria curtidora (cueros crudos, salados y wet-blue flor), mientras que los reintegros han generado una especialización creciente en cuero semiterminado. Dado que la materia prima indispensable de esta cadena de valor tiene una oferta inelástica, este esquema no permite un acceso razonable a los fabricantes de manufacturas para su desarrollo, sobre todo en los segmentos de mayor valor agregado", señalaron desde el área de prensa de CIMA a este medio.

Por esto, reclaman que se aumenten los reintegros a medida que se incrementa el valor agregado, y que las retenciones bajen cuanto más valor se incluya al producto. "En la actualidad, estos incentivos no estimulan la agregación de valor más allá de la etapa intermedia (curtiembres) y deriva en un porcentaje muy significativo y creciente de exportaciones de cuero semiterminado", protestan.

Asimismo, la coyuntura también afecta al empleo, aseguran. "Durante 2013 la caída en el empleo fue del 6,6% y se estima que en el empleo informal fue del 12%, lo que representa una pérdida aproximadamente de 1.500 puestos de trabajo, a lo que se suma a las pérdidas del 2012 y lo que va del 2014, que se aceleró la tendencia; pudiendo llegar a una pérdida del 30%".

Lo cierto es que la primarización del sector es también una evidencia para otros sectores de la cadena del cuero. "El problema es casi histórico. Hoy, en números grandes, el 80% del cuero que sale está semiterminado, pero no manufacturado. Ese valor agregado se realiza afuera", dijo a El Destape el director del Centro INTI-Cueros, Alejandro Markan.

"Las grandes empresas armaron su circuito comercial en el exterior, y venden en cantidades. Entonces los manufactureros dicen que no pueden ser competitivos para exportar, porque no pueden comprar cantidad y a precios competitivos. Por eso sus costos suben", siguió el experto.

No obstante, ninguno de los consultados por este medio puedo confirmar la facturación que maneja el sector, ni tampoco si el cuero es el insumo responsable del aumento que padece el consumidor final de los productos de cuero, o la estructura de costos del sector. Según estimaron los entrevistados, la Cámara de la Industria Curtidora Argentina (CICA) debería tener alguno de estos números, pero ante la consulta, respondieron: "Desde hace varios años atrás hay un tira y afloje, pero no tenemos personal para la prensa. Siempre es el mismo discurso desde los otros sectores. No estamos haciendo estadística".

info cuero.jpg
undefined

Por su parte, las curtiembres reconocen el aumento del que se quejan los manufactureros. "Cuero sobra y no falta, y hay la cantidad que quieran. Por ahí puede que el precio no les sirva en la ecuación con el plástico, pero el cuero aumentó como todas las cosas. Estaba muy barato, demasiado", confirmó a este portal el presidente de la Asociación de Curtiembres de Buenos Aires (ACUBA), Daniel Argentino.

"El kilo de cuero crudo costaba 6 pesos hace 14 meses, y ahora 20 pesos. La materia prima nos aumentó más del 100 por ciento, aseguró Donikián.

"La industria manufacturera no tiene grandes posibilidades de consumir el cuero que se produce. Absorbe sólo el 10 o el 12% para el consumo interno", dijo Argentino, quien advirtió que "las curtiembres grandes, por una cuestión de volumen, venden más en el mercado externo".

Y como si esto fuera poco, la concentración juega un papel cada vez más importante en este rubro. "Pero la concentración es algo histórico que se da en todos los mercados. Hay cuatro o cinco empresas muy importantes, y pymes que tienen a su mercado a nivel interno", advirtió Argentino. Sin embargo, esa pymes cada vez son menos. "Se van cerrando curtiembres por problemas ambientales, porque no pueden asumir los requerimientos medioambientales –la industria es altamente contaminante de aguas-. Las pymes son las que cierran, y las grandes no quieren volcarse al interno", se preocupó Markan.

El Ministerio de Industria impulsó reuniones en el marco del Plan Estratégico Industrial 2020. "Allí surgió que el aumento de las ultimas facturas es evidente. Hoy tenemos una emergencia, pero lo más difícil es revertir la situación para bajarle el precio al frigorífico o para el comerciante que ya pagó", dijo Donikián.