Todo empezó a través de una publicación de Facebook que rápidamente se viralizó. Roxana Grimaldi, una joven de 9 de Julio, compartió su historia y tuvo en pocas horas más de 35 mil me gusta y casi 20 mil compartidos.
La mujer narró cómo hace algunos meses le propuso a Telma, una abuela de 96 años que conoce de toda la vida, irse a vivir con ella. Vecinas desde hace décadas, Roxana explicó que, de chica, Telma le hacía gorros, le cosía ropa para sus muñecas y que lo mismo hizo luego cuando nacieron sus hijas.
Luego de que en 2019 Telma fuera internada tras una caída, su salud se deterioró, su vínculo se volvió más estrecho y fue entonces cuando tomaron la decisión de convivir bajo el mismo techo. "Ella en la casita donde estaba no podía seguir, necesitaba un poquito más de comodidad y a mí se me complicaba demasiado acompañarla en esa situación. Entonces era más fácil que ella viniera", contó Roxana en diálogo con Verónica Lozano. "Ahora para mí es más que una hija, porque me hace todos los trabajos, los mandados", afirmó Telma.
En medio del aislamiento social preventivo obligatorio dispuesto por le gobierno de Alberto Fernández para evitar la propagación del coronavirus, Telma y Roxana pusieron manos a la obra.
Aprovechando todas las habilidades manuales de Telma y la disponibilidad de Roxana, juntas comenzaron un proyecto para producir barbijos para llevarlos al hospital para ayudar. "Yo estoy medio viejita y tengo poco alcance de la vista, pero igual los hacemos", aseguró Telma.