El PAMI dejó sin atención médica por seis meses a todos los jubilados de Gualeguaychú. Ahora, contrató a Nativus SRL, una empresa que no tenía presencia en la ciudad para que brinde el servicio. Esta compañía fue fundada por el mismo jefe de la obra social nacional, Sergio Cassinotti.
En marzo, Mauricio Macri le pidió la renuncia como titular del PAMI a Carlos Regazzoni para que le ceda el lugar a Cassinotti para que avance aún más con los recortes. Como primera medida, dio de baja violentamente todos los contratos del organismo en el país desde mayo y propuso una nueva modalidad de contratación. En lugar de pagarles a las prestadoras por cantidad de pacientes atendidos en cada mes, propuso transferirles montos fijos calculados de acuerdo a la capacidad de prestación. De esta manera planeaba estabilidad, ya que los montos se mantendrían siempre iguales.
Los médicos le guardaron un reparo importante al sistema creado para eliminar los controles y las auditorías: denuncian reciben un pago muy inferior al anterior. Si bien las críticas abundaron, el grueso de las prestadoras aceptó la única opción que les planteó el Gobierno.
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En Gualeguaychú, en cambio, el Colegio Médico lo rechazó. Por la investigación de El Destape, en el PAMI respondieron oficialmente que “el conflicto prestacional que perjudicó la atención de los afiliados de la obra social se debió a la negativa de aceptación por parte de las autoridades del círculo médico frente a las distintas propuestas que se han mantenido durante seis meses”. “Ante esta negativa de brindar prestaciones de médicos especialistas, se produjo únicamente el corte de esta prestación, sin afectar la de los médicos de cabecera, internaciones, cirugía, urgencias y emergencias, que siguen siendo prestadas a través de las distintas clínicas y hospitales locales”, especificaron.
Detallaron oficialmente que el PAMI atiende en tres prestadores de la ciudad: el Hospital Centenarios, el Centro Médico San Lucas SA y Pronto SRL. “La atención a los afiliados a PAMI, continúa siendo normal en cada uno de los distintos prestadores”, comunicaron.
Sin embargo, el presidente del Colegio Médico, que nuclea a los 240 doctores de la ciudad, Emilio Bianchi, le explicó a este medio que “hubiera sido irresponsable acceder a este contrato que nos ofrecían, porque no hubiéramos podido cumplirlo. En el país casi todos lo firmaron, pero lo va a terminar incumpliendo”.
Las quejas del cirujano están fundadas. Cassinotti les ofreció cobrar menos del 14% de lo que antes les daban. Con la modalidad histórica, cada especialista cobraba $ 176 por paciente y ahora facturarían $ 24,50. “Nosotros no podíamos aceptar esas condiciones. Y como el propio PAMI decidió romper los contratos en abril, el 1 de mayo los abuelos quedaron desamparados”, argumentó Bianchi.
A costa de los jubilados, en los seis meses sin prestaciones, el PAMI se ahorró al menos $ 2,6 millones. En noviembre, el organismo firmó un contrato con Nativus SRL, que subcontrata a menos de diez especialistas para brindar un servicio que antes realizaban 240. La compañía fue fundada por el propio Cassinotti en 2007, quien vendió su participación en 2011 a una ignota empresa fueguina.
En el ínterin, el jubilado bancario Oscar Alberto debió pagar de su bolsillo todas las consultas desde ese día. Insulinodependiente y sin remedios gratuitos, destinó una porción de sus haberes a citas médicas que no le correspondía abonar. “El PAMI nos abandonó, quedamos a la deriva por seis meses. Yo me puedo pagar las visitas, pero la mayoría no, y por eso tuvieron que pedirles a familiares y hasta se endeudaron para poder hacerlo”, recordó cuando este medio visitó Gualeguaychú.
Desde la reparación histórica, Calixto Cándido Pedroza cobra $ 1.000 más que la mínima que, sinceró, “sigue siendo poco y nada”. Se jubiló como remisero y aún debe trabajar changas para llegar a fin de mes. Como integrante del Consejo Asesor Municipal del Adulto Mayor (CAMAM), junto a otros adultos mayores organizó manifestaciones para reclamar el regreso de la prestación médica que recién retornó en noviembre, pero aún no fue normalizada.
Mientras, el municipio de Gualeguaychú colaboró en contener a algunos de los 18.000 jubilados del departamento entrerriano que quedaron desamparados. Además de cederles un espacio donde realizan talleres, se hizo cargo de las colonias que el PAMI también decidió discontinuar y reglamentó un descuento del 50% en el boleto del colectivo.