La estrategia del PRO para controlar el Consejo de la Magistratura de la Ciudad

07 de noviembre, 2014 | 18.33

Por Juan Ignacio Agosto
Redacción El Destape


El PRO quiere controlar el Consejo de la Magistratura de la Ciudad. Con este objetivo, la agrupación de abogados macristas cerró una alianza con Gente de Derecho, del extitular del Colegio de Abogados porteño, Jorge Rizzo. Competirá solamente con otras dos listas: una radical y una independiente.

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Las elecciones de los representantes de los abogados que integrarán el Consejo de la Magistratura de la Ciudad se llevarán a cabo el 18 de noviembre y tanto el PRO como el radicalismo han mostrado sumo interés en controlar el organismo, que además de estar encargado de la designación y remoción de jueces, administra una suculenta caja presupuestaria.

Por tal razón, ambas fuerzas han decidido presentarse para ganar el representante que en teoría debería ser de los matriculados de la Capital Federal. Competirán solamente 3 listas: el PRO, que va en alianza con la agrupación de Rizzo (otrora kirchnerista, primer candidato a integrar el Juri), el radicalismo, que lleva su tradicional lista denominada Abogados Pluralistas, y una tercera agrupación, Abogados de Pie, que representa a los matriculados independientes.

Las elecciones serán clave, ya que se espera recibir por parte de Nación mayores competencias penales para que atiendan los jueces locales, y el Consejo de la Magistratura será decisivo para ese nuevo ordenamiento. De los tres representantes de los abogados que se elegirán, dos entrarán por la primera fuerza y uno por la segunda. También se elegirán 8 candidatos a integrar el Juri de Enjuiciamiento. La segunda en la lista de Gente de Derecho es Marcela Basterra, mano derecha del jefe de Gabinete porteño, Horacio Rodríguez Larreta, que aspira a suceder a Macri en la Ciudad.

"El PRO ha hecho una opción de jugar fuerte en la política sectorial de la Justicia", afirmó Agustín Pesce, referente de Abogados de Pie y candidato al Juri, en diálogo con El Destape. Según el abogado, especialista en derecho administrativo, el PRO considera que no puede seguir siendo gobierno en la Ciudad, con aspiraciones nacionales, y tener un poder judicial hostil en su distrito.

El macrismo pretende quedarse con dos representantes, por eso la alianza con Rizzo, y el radicalismo se conformaría con uno. Este dato no es menor: en las últimas elecciones en el Consejo de la Magistratura nacional, el macrismo llevó a su propio candidato (Adolfo Alvarado Velloso), pero celebró que haya sido elegido el radical Miguel Piedecasas (que también tuvo el apoyo del massismo). Tanto el PRO como la UCR afirman velar por un Consejo "no sometido el gobierno de turno" y, a nivel nacional, están cerca de cerrar acuerdos electorales en varias provincias de cara a las presidenciales de 2015. "En el interior, de la oposición al kirchnerismo, los radicales son los que tienen más alternativas de cambio en distintas provincias", dijo a El Destape el presidente del bloque PRO en Diputados, Federico Pinedo.

La relación entre el radicalismo y el PRO se manifiesta a través del presidente de Boca, Daniel Angelici, encargado de la ingeniería electoral del macrismo en la Justicia. De origen radical, Angelici ha cobrado cada vez más protagonismo y su influencia en las decisiones de Mauricio Macri es cada vez mayor. Una prueba es que Laura Alonso, su ahijada política, desplazó a Paula Bertol (más cercana a Federico Pinedo) de la lista de diputados nacionales el año pasado.

Según Pesce, ambos partidos pondrán toda su carne al asador para lograr quedarse con los tres representantes de los abogados en el Consejo. En una elección de 6 mil empadronados, un triunfo se podría garantizar con 2.800 o 3.000 votos. "El PRO tiene abogados que trabajan en la administración pública y el radicalismo también, en la AGN", afirmó el candidato de Abogados de Pie, que propone "llevar a la Justicia abogados independientes, que no hagan política partidaria". "Estamos dispuestos a jugar a fondo para que haya real independencia. Si no, corremos el riesgo de que se partidice la Justicia", concluyó Pesce.

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