El sector de la construcción se recuperó 0,6% en el primer trimestre del año tras cerrar el 2014 con números en rojo, estimó hoy la consultora Ecolatina, al pronosticar un crecimiento "acotado" para ese segmento este año. "Para 2015 prevemos un repunte de la construcción, estimulado tanto por un incremento de los desarrollos privados como del gasto público", sostuvo el informe.
No obstante, consideró que esa expansión será "acotada" porque todavía hay "cierta reticencia a hundir capital en un país con poca previsibilidad", al tiempo que "el déficit del Gobierno está llegando a niveles elevados, por lo cual el incremento del gasto público tiene límites". El repunte del primer trimestre, según indicó el estudio, fue impulsado por una suba en febrero del 2% y en marzo del 3,2%.
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A su vez, la superficie para la construcción acumuló un crecimiento de 1% en el primer bimestre del año, tras el repunte de 2,9% anual en 2014. El estudio indicó que los primeros meses de 2015 marcan "una tendencia positiva para el sector en el mediano plazo", por lo cual aseguró que grandes inversores "compran terrenos y comienzan obras que estarían finalizadas en 2016 ó 2017" con la expectativa de fortalecer la demanda por un mayor dinamismo de la economía y una eventual eliminación del cepo cambiario.
En el primer trimestre de 2015 los despachos de cemento se expandieron 7,2%, mientras las ventas de cemento a granel exhibieron el mayor dinamismo entre enero y febrero de este año, ya que crecieron 11,3%. Por su parte, los despachos en bolsa mostraron un crecimiento más modesto, que fue del 3,6% durante el primer bimestre del año.
"Las perspectivas de desarrolladoras privadas y de las empresas que llevan adelante obras públicas han ido mejorando mes a mes", destacó la consultora. Sin embargo, aclaró que "aunque los primeros indicadores del año son positivos, aún persisten preocupaciones entre las desarrolladoras inmobiliarias y constructoras".
"En particular, continúa inquietando la debilidad de la actividad económica, la falta de inversión en grandes obras, el encarecimiento del crédito y la incertidumbre sobre el recambio presidencial", resaltó Ecolatina.
De ese modo, enfatizó: "A ello debe sumarse la ausencia de obras de refacción, que hasta 2013 habían estimulado la venta de materiales de construcción, pero que mermaron significativamente el año pasado" y alertó que esa caída "coincide con la posibilidad de atesorar dólares". "Durante los primeros dos años del cepo, muchos aprovecharon el exceso de pesos para llevar a cabo reformas del hogar", argumentó en análisis.
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