"No hay una salida fácil a esta crisis. Se ha perdido demasiado tiempo y oportunidades", agregó el funcionario en declaraciones que difunden las agencias de noticias EFE, DPA y Europa Press.
No obstante, Dombrovskis mostró la disposición de comenzar "inmediatamente" nuevas negociaciones con Grecia, aunque recordó que para eso es necesario antes una decisión del Eurogrupo al respecto.
Otro aspecto que preocupa a los socios del Eurogrupo es la estabilidad del euro después que el 61,3% de los griegos le dieran la espalda a las leoninas propuestas de ajuste de los acreedores, por lo que el alto funcionario de la CE buscó llevar tranquilidad.
"La CE y las autoridades de la eurozona estamos dispuestos a hacer todo lo necesario para preservar la estabilidad financiera del euro", dijo Dombrovskis, preguntado por si temía que otros países de la zona del euro, como los del sur, sufrieran un contagio.
En esta linea y en un gesto que buscó contribuir a un acuerdo del gobierno con las instituciones europeas, el primer ministro griego, Alexis Tsipras, corrió hoy a su cuestionado ministro de Finanzas, Yanis Varufakis.
"Poco después de anunciar los resultados del referéndum se me comunicó que había ciertas preferencias de algunos participantes del eurogrupo de que sería mejor que estuviera ausente de estas reuniones", dijo Varufakis a través de su blog.
Varufakis agregó que "el primer ministro consideró esa idea potencialmente útil para alcanzar un acuerdo" con los acreedores.
Varoufakis fue el principal negociador desde que el Primer Ministro de izquierda de Grecia asumió el poder el pasado 25 de enero con el compromiso de acabar con las politices de ajuste y renegociar la deuda con los acreedores internacionales del país heleno.
Desde entonces fue la figura más controvertida en el extranjero y en las reuniones del eurogrupo muchos ministros se quejaban, más o menos abiertamente, de que era difícil colaborar con el titular griego.
Esto llevó a que en abril Tsipras decidiera reducir su papel en las negociaciones en Bruselas y dejara de facto al mando de las conversaciones al viceministro de Relaciones Internacionales Económicas, Euclidis Tsakalotos.
Según informó el portavoz del Ejecutivo, Gavriil Sakelaridis, tras reunirse en el palacio presidencial con los líderes de los partidos políticos, con excepción de los neonazis, el Ejecutivo anunciará su sucesor.
La situación, más allá de las declaraciones, mantiene en vilo al Eurogrupo y los contactos y negociaciones son constantes.
Hoy se produjo una teleconferencia entre los presidentes de la CE, Jean-Claude Juncker; del Consejo Europeo, Donald Tusk; del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem; y del Banco Central Europeo, Mario Draghi.
Por su parte, el consejo de gobierno del Banco Central Europeo (BCE) se reunirá en Frankfurt para decidir si mantiene la asistencia financiera de urgencia a los bancos griegos.
El BCE tiene la llave de la permanencia de Grecia dentro de la Eurozona ya que es una institución formalmente independiente del poder político y que debe atenerse a las reglas de la unión monetaria y a los tratados.
Esto significa, por ejemplo, que no puede seguir proporcionando liquidez extraordinaria por mucho tiempo en ausencia de un programa de ajuste y reformas acordado entre el gobierno griego y sus acreedores.
Además, ante un riesgo de impago creciente (Grecia no pagó al FMI su último vencimiento, de 1.600 millones de euros), el BCE puede verse obligado a exigir mayores garantías colaterales a los bancos griegos a cambio de sus inyecciones de liquidez, lo que asfixiaría todavía más a los extenuados bancos y los precipitaría a la quiebra.
Por eso, apenas finalizado el referéndum, Tsipras, declaró que su primera prioridad es restablecer el normal funcionamiento del sistema financiero, después de una semana de "corralito", algo que podría suceder mañana martes.
Por otra parte, la canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, Francois Hollande, se reunirán hoy en París para consensuar la respuesta europea.
Entre ambos surgieron discrepancias cuando Tsipras convocó el referéndum, ya que mientras Hollande urgió a reanudar las negociaciones de inmediato mientras que Merkel insistió en que había que esperar al resultado de la consulta.
Hoy, el Gobierno alemán negó que se den en este momento las condiciones para negociar un tercer rescate para Grecia, aunque indicó que "la puerta sigue abierta" para el diálogo entre Atenas y sus acreedores.
El anuncio fue hecho por el portavoz del Ejecutivo alemán, Steffen Seibert, quien advirtió que "Grecia está en la eurozona y está en sus manos y de su gobierno que esto pueda seguir siendo así".
Seibert agregó que en la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno europeos que se realizará mañana para analizar la situación griega, habrá "oídos abiertos" para escuchar la nueva propuesta que se comprometió a llevar Tsipras.