En un acto de torpeza inusitado, el periodista Eduardo Feinmann dejó expuesta su operación de prensa que venía llevando adelante desde el programa donde es panelista a favor del Gobierno y para atacar a la industria del cine.
Feinmann cometió dos bloopers en las redes que desnudaron la maniobra para favorecer al Gobierno y al ministro de Cultura, Pablo Avelluto.
Feinmann se convirtió en una especie de vocero de Avelluto y realizó una operación desde Animales Sueltos que le valió hasta el repudio de afines al macrismo como el cineasta Juan Campanella y el periodista de cine Gustavo Noriega.
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Pero su movida quedó en offside. Ayer Feinmann publicó en Twitter fotos de dos supuestos gerentes del INCAA, el instituto del cine que quedó acéfalo luego de que Avelluto echara a su director por supuestos hechos de corrupción denunciados por, entre otros, el propio Feinmann. El periodista intentó escrachar a dos gerentes de allí con fotos.
Sin embargo, el periodista recibió información falsa y difundió fotos de dos personas que no eran tales. Una de ellas hasta le contestó vía Twitter. Afirmó que no es gerente de ningún lado y es periodista de Página 12.
Ante tal lamentable error y el repudio en las redes sociales, Feinmann tuvo que borrar la información falsa que difundió, en un claro hecho de posverdad en las redes. Un papelón, otro más, de Feinmann, que ahora dejó al desnudo su operación de prensa.