Las disputas por la reestructuración del mercado eléctrico no sólo se dan en Nación, sino también en la provincia de Buenos Aires. Es por eso que el gobierno de Axel Kicillof rebajará los enormes ingresos que reciben las distribuidoras eléctricas, los cuales se encuentran parcialmente dolarizados por una disposición de María Eugenia Vidal.
La historia se remonta enero de 2017. Como resultado de la Revisión de Tarifa Integral (RTI), el Ministerio de Infraestructura y Servicios Públicos estableció los nuevos cuadros tarifarios para las distribuidoras regionales.
Según pudo averiguar El Destape, allí se fijó un mecanismo de ajuste anual del valor agregado de distribución (VAD), a aplicar en agosto de cada año. En la fórmula polinómica de ajuste se ponderó el tipo de cambio (8%), el Índice de Salarios (56%), la inflación mayorista (24%) y la minorista (12%). Así, el tipo de cambio se incluyó en la fórmula de ajuste como un ponderador de los costos de capital.
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El VAD configura el importe que las empresas destinan para afrontar los costos que significa construir, operar y mantener la infraestructura de la red eléctrica, es decir: obras, insumos, maquinarias, salarios, entre otros. La dolarización de una fracción de esta variable fue aprovechado por el empresario Rogelio Pagano.
Desde hace tres años, la distribución de la energía eléctrica es controlada por Pagano. Este empresario dispone de la luz de Buenos Aires con Eden (norte y centro), Edea (Costa Atlántica y centro), Edes (sur) y Edelap (La Plata y alrededores), conformando un monopolio privado de la distribución en la provincia. Y también ostenta la dirección de Edesa, la distribuidora de luz de Salta. Como tantos amigos del macrismo, durante estos cuatro años no la pasó nada mal.
Según los últimos informes disponibles de la Comisión Nacional de Valores, en el bienio 2017- 2018, sólo Edelap se obtuvo $ 6218 millones. En ese lapso, el crecimiento de las ventas en valores constantes se incrementó un 32%.
Durante ese período, la rentabilidad económica- que mide la tasa de devolución producida por un beneficio económico respecto al capital total, incluyendo todas las cantidades prestadas y el patrimonio neto- fue de 25,9%. Sin embargo, la rentabilidad financiera – que relaciona el beneficio económico con los recursos propios necesarios para obtener ese lucro – alcanzó el 70,7%.
Adicionalmente, si se observan los resultados integrales al tipo de cambio promedio de cada año se puede obtener un estimado de lo embolsado en el período 2016-2018: la firma controlada por Pagano se hizo de U$S 289 millones.
Cambios de fórmula
En su discurso por la apertura de sesiones ordinarias, Kicillof lo adelantó: “Hay algo más de fondo porque lo que se resolvió es revisar los cuadros tarifarios. Yo no lo sabía, tienen un componente en dólares. Una parte de la ecuación tarifaria que no está en Nación así; es en dólares. Sube el dólar y sube la tarifa. Lo voy a decir pero muy sinceramente no tiene una justificación económica”.
Desde el gobierno provincial señalaron a este medio que “la desdolarización de la fórmula de ajuste va a ser un hecho, ya que fue uno de los primeros puntos acordados con las empresas en el marco de la revisión de la RTI que se está llevando a cabo durante los 180 días de congelamiento”.
Fuentes directas adelantaron: “esto implica un impacto en el futuro cuando se vuelva a aplicar algún aumento. La idea de sacar el tipo de cambio de la fórmula de ajuste es prevenir que haya saltos bruscos que se trasladen a la tarifa”. De momento, los equipos técnicos buscarán “ponderar con índices que reflejen la estructura de costos local”, aunque aclararon que “todavía no está definido la variable que va a reemplazar a ese 8%”.
Por lo pactado, el Ministerio de Infraestructura y Servicios Públicos verificarán los resultados de las inversiones proyectadas por las empresas para 2019, de los cuales desconfían de su ejecución. Esa fue una de las condiciones que planteó Kicillof cuando congeló las tarifas por seis meses, hasta el 31 de julio.
Cabe recordar que en la provincia se paga un 26% por encima de la media nacional. Actualmente, los usuarios residenciales pagan $ 3,20 el kilowatt hora y podría haber sido aumentado aún más.
Apenas había asumido la gobernación, Kicillof decretó la cancelación de un tarifazo previsto por Vidal que iba a hacerse efectivo a principio de año. La resolución había sido firmada días después de la paliza electoral que recibió en los comicios de octubre.
Esto significaba que a partir del 1 de enero se iba a continuar aplicando el Incremento de Costos Tarifarios -pérdidas por inflación y devaluación del peso-, hasta que se recuperen las diferencias no obtenidas por el período comprendido entre el 1 de enero y el 31 de diciembre de 2019. De esta manera, los cargos fijos se iban a incrementar más de 40%, para ubicarse en $ 121,26 para usuarios residenciales.