Las restricciones al sistema bancario trajeron varias complicaciones en medio de la cuarentena, y, especialmente, a los jubilados. Quienes no poseen tarjeta de débito no tienen ninguna alternativa para poder cobrar el haber de marzo.
A pesar de las facilidades que ofreció la Anses para agilizar los cobros, una porción de los beneficiarios quedaron afuera del sistema. El aislamiento preventivo obligatorio impide la atención por caja y la recepción “en mano” del dinero, una tradición en el segmento poblacional que conforma el sistema previsional.
Según pudo confirmar El Destape, fuentes directas de Anses lamentaron que “por ahora no hay otra alternativa”, aunque remarcaron que “el 96% está bancarizado”. Por ejemplo, el Banco Nación paga poco más de 1.950.000 jubilaciones y pensiones en todo el país. Dentro de ese parangón, se estima que 13.000 jubilados no tienen su tarjeta de débito.
Respecto a una posible solución, desde Anses informaron que “los bancos están agilizando la entrega de tarjetas y facilitando blanqueo”. Esto es efectivamente así, ya que diversas entidades financieras publicitan en sus webs y en televisión campañas para informar sobre los mecanismos para acceder a la tarjeta y al uso del homebanking.
Cabe recordar que el Banco Central suspendió las actividades bancarias presenciales entre el 20 y el 31 de marzo. Aún así, estipuló que deberán seguir prestando servicios a los usuarios en forma remota, como por ejemplo, para la constitución de plazos fijos, el otorgamiento de financiaciones y para garantizar los servicios relacionados con el sistema de pagos.
En esa misma línea, el ente dirigido por Alejandro Vanoli dispuso la suspensión del trámite de actualización de fe de vida, por parte de los jubilados y pensionados. Es que las fechas de cobro para aquellos que ganan más de $ 17.859 cayeron entre el 25 y el 31 de marzo.
De momento, y por la inédita crisis sanitaria, desde el Gobierno analizan otro canal de pago que pueda atender esta demanda.
Una opción podría ser el cobro a través de las oficinas de Correo Argentino. Se podría implementar para el pago del Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) de $ 10.000 en el caso de aquellas personas que no posean una cuenta bancaria. De igual manera, podría correr para jubilados que no tienen la tarjeta para acercarse al cajero. Sin embargo, se trata de una especulación que aún no tiene forma.