El senador del Frente de Todos, Jorge Taiana, fue elegido por sus colegas como presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores y de Culto del Senado, en reemplazo del radical Julio Cobos. Durante la reunión de constitución de la comisión, el ex canciller de Néstor y Cristina Kirchner señaló que será tendrán un tarea “muy activa” y que su trabajo “tendrá como eje la defensa de la soberanía y del interés nacional”.
“Hemos conformado una comisión plural donde están representados todos los sectores políticos de esta cámara. En el mundo interconectado en el que vivimos, la política exterior es un tema fundamental y la dimensión parlamentaria tiene un rol destacado”, sostuvo el senador que a su vez expresó: “Nuestra misión será obtener las mejores condiciones para el desarrollo y el crecimiento del país y para eso buscaremos los consensos necesarios”, resaltó.
Como vicepresidente de la comisión quedó Cobos, que fue propuesto por su correligionario Julio Martínez. Durante la reunión se produjo un breve intercambio por el cargo de secretario. El PRO quiso meter por la ventana al misionero Humberto Schiavoni, pero finalmente ese lugar lo ocupará la neuquina Lucila Crexell, del Movimiento Popular Neuquino. Crexell había integrado el interbloque Cambiemos durante el período anterior, aunque se distanció por un conflicto por la UCR sobre el reemplazante del fallecido candidato a senador, Horacio "Pechi" Quiroga. Finalmente la justicia le dio la razón a Crexell y ella ocupó la banca que le hubiera correspondido al ex intendente radical de Neuquén.
“Hay muchos temas relevantes para abordar en la comisión pero, sin duda, la prioridad será conseguir el más amplio apoyo político al gobierno para la reestructuración de la deuda. También avanzaremos en estrategias de integración regional y en el fortalecimiento del reclamo de soberanía sobre las Islas Malvinas”.
Finalmente, Taiana se refirió a la gira europea del Presidente Fernández y la calificó de “muy exitosa” por el gran respaldo que obtuvo de importantes líderes europeos como los jefes de Estado de Francia, Italia, España y el Vaticano en la renegociación de la deuda con el FMI.