El Gobierno logró aprobar en el Congreso la devolución de 15 puntos del IVA para los productos de la canasta básica que consuman jubilados y beneficiarios de planes sociales. Pero la iniciativa viene con dos puntos importantes: el primer, que ya se conocía, es que tiene un tope de reintegro de 300 pesos por mes; lo segundo es que dicha devolución se hará hasta en seis cuotas.
Efectivamente, para poder acceder al beneficios los titulares de planes sociales y jubilados deberán gastar con el sistema de tarjeta de débito, algo que puede complicarse en lugares en donde la economía informal es muy grande, y luego se reintegrará esos 300 pesos por mes en su cuenta bancaria. A pesar de que el IVA es de 10,5% para productos como la leche, igualmente el retorno será de 15 puntos en ese caso, precisó el ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat-Gay.
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Sin embargo, en una conferencia de prensa que brindó junto a Carolina Stanley (ministra de Desarrollo Social) y Alberto Abad (titular de la AFIP), Prat-Gay informó que el pago se hará escalonado, independientemente del costo de la compra.
Así, en este mes de junio recibirá el reintegro en dos cuotas de 150 pesos, sin importar el gasto. En julio, será en las cuatro primeras compras, con devoluciones de 75 pesos en cada caso. En agosto, se devolverá en las seis primeras compras, con 50 pesos en cada caso.
Según explicó el ministro, la intención es que "el beneficiario adquiera la gimnasia" de pagar con tarjeta y no en efectivo, a pesar de la gran cantidad de comercios que realizan transacciones de manera informal.
A los 15 puntos de devolución de este beneficio se le suma el 5% por el uso de tarjeta de débito, por lo que el Estado terminaría devolviendo casi la totalidad del IVA en los alimentos.
Para defender la medida, Prat-Gay dijo que en el caso de jubilados que utilicen plenamente el descuento de los 300 pesos (que representa un gasto en el comercio de unos 2 mil pesos) "equivale a retrotraer los precios de la canasta alimentaria a noviembre del año pasado".